Analistas

Regiones que sostienen al país

Sergio Mutis Caballero

En el contexto nacional de crecimiento económico bajo y de grandes retrocesos sociales, las regiones más dinámicas han sido el dique de contención que evita que Colombia se hunda más. Entre ellas, Bogotá que no solo resiste: lidera, crece y empuja. La resiliencia del tejido empresarial y la gestión del alcalde Galán son responsables de esta resistencia.

La capital representa más de 25% del PIB nacional. En el primer trimestre de 2025, el índice de actividad económica de Bogotá creció 3,7%, por encima de 2,7% nacional. La construcción fue protagonista, creciendo un 10,8% en 2024 y aportando 20% del crecimiento de la ciudad. La inversión extranjera en el país marcó -15,2% menos en 2024 frente a 2023-, mientras que en Bogotá la misma creció.

El empleo también marca distancia con el promedio nacional: entre enero y junio de 2025, el desempleo en Bogotá fue de 9,2%, cayendo 1,2 puntos frente al mismo periodo de 2024. En lo social, la ciudad volvió a marcar la pauta: la pobreza monetaria bajó de 24,2% a 19,6% y la extrema de 5,9% a 4,2% entre 2023 y 2024. Esto significa que 352.000 personas salieron de la pobreza y 134.000 de la extrema, con una reducción 1,6 veces superior a la nacional en pobreza y el doble en pobreza extrema. Bogotá fue responsable de uno de cada tres colombianos que mejoraron su condición.

La seguridad alimentaria, otra herida abierta a nivel nacional, también tuvo en Bogotá una recuperación mucho más vigorosa. Mientras el país apenas redujo este indicador en 0,6 puntos porcentuales en 2024, la capital lo bajó de 21,2% a 13,9%, beneficiando a 564.000 personas con acceso suficiente a comida saludable, gracias al programa llamado Bogotá sin Hambre 2.0.

Estos avances no son producto del azar. Son fruto de planeación y ejecución. Responden a políticas consistentes y liderazgo claro. En vivienda, el Distrito ha priorizado el hábitat, el suelo útil con densificaciones y subsidios focalizados para cuotas iniciales de vivienda social. En infraestructura, la ciudad mantiene un ritmo sostenido: avanza la Línea 1 del Metro, se proyectan más cables aéreos, se inicia el Regiotram, continúan ampliaciones de TransMilenio y progresa la consolidación de Bogotá como Ciudad-Aeropuerto.

A ello se suma el inicio de la construcción del Campus de Innovación, Ciencia y Tecnología, una alianza entre la Cámara de Comercio, Corferias, el Sena, cajas de compensación y el Distrito, que busca articular educación, tecnología, empleo y emprendimiento. Bogotá no solo sostiene: avanza. Y en estos tiempos, esa es una diferencia que marca el futuro del país.

Así, el contraste de Bogotá y algunas otras regiones, con el panorama nacional es evidente. En un país con inversión extranjera en retroceso, crecimiento mediocre y reducción social lenta, las cifras de Bogotá-Cundinamarca, Antioquia, Valle, Santander y Atlántico confirman que sus dinamismos económicos y su institucionalidad robusta son un salvavidas.

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Bogotá - Crecimiento económico - Transmilenio - Regiotram de Occidente