La economía colombiana creció un modesto 2% en 2016. Este resultado, sin embargo, superó el observado en Chile, Argentina, Ecuador y Brasil. El crecimiento se vio jalonado por un consumo privado que se mantiene sorprendentemente fuerte. Sin embargo, las exportaciones continúan deprimidas y preocupa la contracción de la inversión. Si bien la economía continúa creciendo por debajo de su potencial, hay razones para esperar que este año sea mejor. En particular, el escenario externo en 2017 será bastante más auspicioso.
Las expectativas para la economía global, a pesar de la incertidumbre política, son mejores este año. Se espera una modesta recuperación en las economías desarrolladas, que de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, crecerán 1,8%, completando tres años de crecimiento positivo. Estados Unidos en particular se espera crezca 2,2% este año y la zona Euro 1,4%. El Reino Unido, dada la incertidumbre asociada a su salida de la Unión Europea, crecería solo 1,1%.
Sin embargo, los temores de deflación en los países desarrollados se han disipado, y la inflación ha comenzado a repuntar. De otra parte, la eventual desaceleración de China ha dejado de ser una preocupación. Así mismo, los precios de los commodities, en promedio son 10% más altos que hace un año, lo que mejora el panorama para las economías emergentes.
Si bien prevalecen las dudas acerca del impacto de la Presidencia de Trump sobre la economía Estadounidense, por el momento los mercados celebran las expectativas de recortes en los impuestos y un (eventual) mayor gasto en infraestructura. La Sra. Yellen coincide con esta percepción más auspiciosa, y ya ha anunciado que la Fed continuará subiendo sus tasas este año; los mercados descuentan por lo menos tres aumentos más.
Este escenario para la economía mundial debe resultar en una demanda externa ligeramente más fuerte que un año atrás. La normalización de la política monetaria en Estados Unidos generará presiones de depreciación sobre las monedas emergentes. Lo anterior sumado a un precio del petróleo aproximadamente 28% más alto, debería darle un empujón a las exportaciones y contribuir a reducir el déficit en cuenta corriente.
El panorama para la inversión también debe ser mejor en 2017. De una parte, esta eventualmente se debe beneficiar de menores tasas de interés. Por otro lado, la inversión en el sector petróleo sufrió una contracción de más de 50% en 2016 como resultado de los bajos precios. Sin embargo, este sector fue uno de los ganadores con la reforma tributaria, al beneficiarse de incentivos a la inversión. Teniendo esto en cuenta, junto con los mayores precios, la Asociación Colombiana de Petróleo proyecta que la inversión del sector crezca más de 60% este año, alcanzando cerca de US$5.000 millones. Solo Ecopetrol se espera invierta US$3.500 millones.
Así mismo, los proyectos de inversión en infraestructura de transporte, 4G, deben tomar impulso este año. Si bien el arranque ha sido más lento de lo esperado, dado que los cierres financieros se vieron dilatados por el choque macroeconómico, este año se espera que la inversión en estos proyectos aumente casi 60%, alcanzando $9,2 billones.
Así las cosas, la economía colombiana debería crecer aproximadamente 2,5% en 2017, por encima del promedio de América Latina (1,6% según el FMI). Este crecimiento, adicionalmente, dependerá en menor medida del consumo local, y más de la inversión y las exportaciones, lo cual es bueno. 2017 será un mejor año.