Factoring: herramienta de liquidez para Pyme
Los empresarios se enfrentan a diversos retos como el acceso a otros mercados, virtualización de procesos, competitividad y la financiación de sus negocios. Para entender cómo está la financiación de las Pyme, tomaremos como referencia las cifras de la Gran Encuesta Pyme (GEP) realizada por Anif, donde las solicitudes de crédito al sector financiero predominaron por encima de otros métodos alternativos de financiación.
Según la GEP del primer semestre de 2017, las solicitudes de crédito realizadas por las medianas empresas registraron un 36%. Por su parte, el uso de otras fuentes alternativas de financiación sigue siendo moderado, como en el caso del Factoring.
Una de las razones por las cuales los empresarios no hacen uso de este mecanismo de financiación es por desconocimiento. Recordemos que el Factoring es una modalidad de financiación empresarial que permite obtener capital de trabajo hoy, convirtiéndose en una alternativa interesante para conseguir los recursos que se requieren, dando liquidez inmediata a las Pyme que tienen que esperar pagos a 30, 60, 90 o más días, por medio de las cuentas por cobrar.
Con respecto al sistema de financiación de Factoring, las ventajas que ofrece esta modalidad son muy competitivas para los empresarios; entre ellas, obtener liquidez inmediata sin generar pasivos pues constituye dinero en efectivo, no un crédito; mejora los indicadores financieros de la empresa; reserva las líneas de crédito bancarias para proyectos de largo plazo; incrementa la disponibilidad de recursos a medida que aumentan las ventas; convierte las ventas a plazo en ventas al «contado»; obtiene descuentos por pronto pago con sus proveedores; reduce la dependencia de los bancos como fuente de financiamiento; permite planificar mejor el flujo de caja y ampliar los términos de las ventas.
Cabe destacar que Colombia ha reglamentando esta actividad y en especial lo referente al descuento de facturas a través de la Ley 1231 de 2008 y las posteriores normas que definen una serie de requisitos para que este descuento cuente con todas las seguridades legales.
Ahora bien, todo empresario conoce las necesidades y problemas por los que pasa una compañía para determinar la mejor estrategia de financiamiento a seguir y lograr un crecimiento sostenido. Entender que la liquidez es parte fundamental de su labor, es el primer paso para trazar la hoja de ruta hacia las soluciones más convenientes y rápidas. Contrario a los problemas de utilidad, los problemas financieros de liquidez requieren de una respuesta urgente en el corto plazo y de una detección oportuna para que el curso normal del negocio no se vea alterado, sin afectar su nivel de endeudamiento y eligiendo la variante de financiamiento que más le convenga, solución que se puede alcanzar con el Factoring.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, las Pyme deben ver en el Factoring un aliado estratégico para la competitividad de su negocio, pues se convierte en un instrumento de financiación con múltiples ventajas.