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Buenas prácticas agrícolas, manejo de herbicidas

Profesor Yarumo

Esto es verdad y aplica para prácticamente todo y utilizamos en nuestro diario vivir, pero lo más importante es utilizar los recursos de manera correcta y adecuadamente.

Cenicafé lleva investigando hace varios años la metodología más acertada para el manejo integrado de arvenses, que consiste en la oportuna y adecuada combinación de diferentes prácticas de cultivo como lo son los manejos mecánico, químico, manual, biológico y cultural. Esto, con el fin de reducir la interferencia de las arvenses a niveles que no afecten el rendimiento de los cultivos, disminuir los costos de producción y proteger los suelos contra la erosión.

Se busca bajar la interferencia de las arvenses más agresivas y mantener las más nobles, y una de las formas de hacerlo en la agricultura es aplicando de manera focalizada herbicidas, pero ojo, aplicándolo solo a las arvenses agresivas. Aquí les doy algunos consejos que debemos tener en cuenta al momento de hacer la aplicación, no solo de herbicidas, sino de agroquímicos en general, pues cuidar la salud y a la naturaleza está en nuestras manos:

• Antes de iniciar la aplicación, lea la etiqueta del producto con el fin de tener las precauciones necesarias para manipular el agroquímico a la hora de la medición, mezcla y aplicación.

• Utilice una adecuada tecnología de aplicación: aplique el producto en el momento oportuno, con una dosis correcta y una adecuada calibración de los equipos de aplicación.

• Los equipos de aspersión deben estar en buen estado, es decir, no deben presentar fugas o goteos.

• Utilice un equipo de protección adecuado, el cual debe estar constituido por mono gafas, careta, gorra con capucha, camisa y pantalón (fabricados en lo posible con material hidrorepelente), botas de caucho y guantes de nitrilo.

• En el lote, donde se va a realizar la aplicación del producto, no deben estar personas realizando otra labor, y mucho menos niños.

• Para destapar las boquillas, utilice un cepillo. Por ningún motivo intente destaparlas soplándolas con la boca.

• Los plaguicidas se deben guardar siempre en una caja y en un sitio seguro.

• Los envases vacíos de plaguicidas deben acumularse en un solo sitio del lote. Estos deben inutilizarse perforándolos y eliminándolos según la legislación y las normas locales vigentes.

• Las aplicaciones generalizadas y reiteradas en todo el lote generan altas pérdidas de suelo por erosión y deslizamientos, además, pueden contribuir a la aparición de arvenses resistentes a los herbicidas.

• Durante las aplicaciones de plaguicidas no debe comer, fumar o beber. Así mismo, la ropa que use para realizar la aplicación debe estar limpia, y no es aconsejable usar la misma ropa para varias aplicaciones, sin antes lavarla. Al finalizar las aplicaciones debe bañarse y ponerse ropa limpia.

Como me enseñó mi papá, todo en la vida depende del uso que le demos, y en este caso específico, en la agricultura los herbicidas son buenos aliados siempre y cuando se utilicen de manera correcta pues de esto dependen los resultados beneficiosos o perjudiciales para nuestros ecosistemas, cultivos, y nuestra salud. El compromiso de cultivar alimentos, materias primas y, en nuestro caso específico, el mejor café del mundo, cada vez debe estar más enfocado a la producción con calidad sostenible.

Hasta la próxima.