Colombianos en el top 10 de los compradores extranjeros de vivienda en EE.UU.

Estados Unidos sigue siendo un imán para inversionistas y migrantes de todo el mundo, y el mercado inmobiliario no es la excepción. En el último año, los colombianos lograron consolidarse en el top 10 de compradores extranjeros de vivienda en ese país, con una participación de 3% en el total de transacciones realizadas por foráneos.

Aunque la cifra pueda parecer modesta frente a gigantes como China (15%) o Canadá (14%), el hecho de que Colombia aparezca junto a economías como Brasil, Nigeria y Emiratos Árabes Unidos evidencia el creciente interés de los connacionales en este mercado.

Todavía hay un amplio margen de potencial si se compara con la demanda de inversionistas procedentes de países como México (8%) o India (6%), que completan el podio de mayores compradores.

“Invertir en bienes raíces en EE. UU. es considerado una inversión de alta calidad para los extranjeros. La estabilidad de la economía estadounidense permite a las personas generar riqueza a través de opciones de financiamiento, potencial de ingresos pasivos y valorización de propiedades. También actúa como una cobertura inteligente frente al riesgo cambiario —diversificar tus activos internacionalmente significa no poner todos los huevos en una sola canasta, especialmente en tiempos de incertidumbre económica local.”, explicó Yuval Golan, CEO de Waltz, consultora de inversión en inmuebles residenciales en EE.UU.

Un mercado que mueve miles de millones

De acuerdo con la Asociación Nacional de Realtors, a través de su informe Perfil de Transacciones Internacionales en Bienes Raíces Residenciales en EE. UU., entre abril de 2024 y marzo de 2025 los compradores extranjeros adquirieron propiedades por US$56.000 millones, equivalentes a 2,5% del total de ventas de vivienda existente en ese país, que alcanzó los US$2,2 billones.

Más allá de su tamaño relativo, este segmento tiene un rasgo llamativo: paga más caro. El precio medio de compra fue de US$494.400, muy por encima del promedio general de US$408.500.

Además, los extranjeros tienden a ver la vivienda no solo como techo, sino como activo y estilo de vida. Casi la mitad (47%) adquirió propiedades con fines de inversión, vacaciones o ambas, frente a 16% de los compradores locales.

Florida, la meca de la inversión extranjera

El mapa de destinos muestra claras preferencias: Florida concentró el 21% de las compras internacionales, seguida de California (15%), Texas (10%) y Nueva York (7%). La elección no sorprende: se trata de estados con comunidades latinas consolidadas, climas favorables y mercados inmobiliarios dinámicos.

En el caso de los colombianos, Miami, Orlando y Houston figuran como epicentros naturales por la cercanía cultural, los vuelos directos y la posibilidad de invertir en zonas con alta demanda turística.

Un flujo que también retorna a Colombia

El interés inmobiliario de la diáspora no solo se proyecta hacia EE. UU. También se refleja en el mercado local. Según cifras del sector, en el primer semestre de 2025, los colombianos residentes en el exterior compraron más de 5.500 viviendas nuevas en Colombia, lo que representó entre 6% y 7% de las ventas nacionales.

El valor promedio de esas adquisiciones fue de $320 millones, con un aumento de 6% frente a 2024. La mayoría (58%) correspondió a vivienda No VIS, y 92% de las operaciones se financió con créditos hipotecarios desde el extranjero. Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Pereira concentraron la mayor parte de la demanda, aunque crece el apetito por destinos intermedios y costeros.

Los colombianos en el exterior cumplen hoy un doble rol: dinamizan el mercado inmobiliario estadounidense, ubicando al país en el top 10 de compradores, y al mismo tiempo alimentan la demanda de vivienda en Colombia, convirtiendo las remesas en ladrillo.