Consumo

Consolas de videojuegos se resisten al multitasking

Andrea Carranza Garzón

¿Quién puede vivir sin el multitasking? Hacerlo todo y al mismo tiempo parece ser la filosofía de los seres humanos. Profesionales, madres y padres, hijos, en fin, esta “habilidad” la tenemos todos, excepto quienes se aferran a los controles de sus videojuegos. El multitasking aún no logra robarle la atención a las consolas.

Cualquier momento y lugar parecen ser propicios para hacer multitasking. Un estudio de BrandStrat demuestra que, en promedio, los colombianos usan dos dispositivos simultáneamente.

Los usuarios más multitarea son los estratos 3 y 4 con 2,10 y 2,17 dispositivos al tiempo. Y la ciudad donde más se utilizan aparatos simultáneamente es Medellín, con 2,18 frente a los 1,96 de Bogotá.

El celular es el que siempre está presente cuando se usan otros dispositivos. La realidad es que este se volvió una extensión de nuestros cuerpos. Mientras vemos televisión, comemos y usamos el portátil o el PC, siempre está también el smartphone. El mundo de hoy está marcado por la ubicuidad de los teléfonos inteligentes.

Y son casi tan omnipresentes, como dijo alguna vez el teórico canadiense Marshall McLuhan sobre la tecnología, que se vuelven extensiones nuestras que nos entumecen o convierten en sonámbulos. O nos matan, como desafortunadamente ha ocurrido por el hecho de manejar y chatear al mismo tiempo. Sin embargo, esto no parece inmutar a los gamers. De hecho, en medio de la desaparición de la exclusividad de los medios, el uso único de la consola, aumenta.

En la medición de 2012, 40% de los encuestados dijeron utilizar solo este dispositivo, frente a 61% de la encuesta de este año, realizada entre el 5 y 13 de junio, a 1.000 personas mayores de 18 años, en ocho ciudades. Lo cierto es que la explicación a estar aferrados a los controles puede ser algo insípida y esperada. Un simple “porque me gusta”, lo resume mejor.

“Si bien las consolas traen muchas más funcionalidades, cuando juegas lo que menos quieres es que te interrumpan. Los juegos comunican demasiada información y si te volteas a responder podrías estar perdiéndote de algo importante”, dice Eivar Rojas, desarrollador de videojuegos.

Incluso, si esta medición se hubiera hecho en los noventa con el Supernintendo como consola estrella, la respuesta hubiera sido la misma.

Hoy en día las consolas han creado funciones para que las familias las usen como un centro de entretenimiento, para que los papás vean Netflix o las mamás escuchen música, agrega Rojas.

Mientras que las consolas ganan exclusividad, las revistas y periódicos la pierden. Antes, en 2012, 59% de los encuestados decía estar concentrado leyendo alguno de estos medios. Mientras que 23 de cada 100 personas dijeron usar su celular mientras leían los productos. Dos años después esta última cifra se duplicó. Ahora más personas leen y utilizan su smartphone.

La aparición de nuevas y diversas aplicaciones ha hecho que también la lectura se acompañe de la multimedia. Un ejemplo es la app de realidad aumentada, que varios diarios tienen para hacer más interactiva la lectura.

Esto evidencia que el celular se ha vuelto indispensable; de hecho, la medición de BrandStrat demuestra que su uso aumentó de 92% en 2012 a 98%. Lo difícil, al parecer, será robarle la atención de los jugadores de las consolas.