Nace un nuevo viajero en Colombia

Nuestro país no es ajeno a este fenómeno global y es que los colombianos también queremos viajar más. Con el boom de la clase media y el aumento de la oferta turística local e internacional, en nuestro país ha nacido un nuevo viajero, una categoría que permanecía escondida y que empieza a aflorar. Se trata de aquellas personas que quieren aventurarse a viajar sin tanta planeación, que prefieren comprar sin intermediarios, que no le temen a abordar un avión y salir de la rutina, que buscan experiencias locales en los destinos a los que viajan y que están dispuestos a invertir más en gastos que les representen placer y no en costos innecesarios. 

Esta nueva categoría de viajero aprecia la libertad de escoger qué quiere, cómo lo quiere y cuándo lo quiere. No sabe de imposiciones y solo paga por lo que realmente desea. Y aunque este nuevo turista puede estar relacionado con el fenómeno millennial, no es exclusivo de esta generación. En Wingo, nos dimos cuenta de que esta es la realidad del mercado colombiano y por esto desarrollamos un producto que respondiera a este creciente anhelo.

El nuevo viajero quiere que lo escuchen y ser tenido en cuenta. Además, se rehúsa a asociar bajos precios con baja calidad. De hecho, no tolera el incumplimiento ni un mal servicio y eleva su voz en redes u otros medios para expresar su inconformidad. No teme a gastar de más en los destinos y por ende busca minimizar su gasto en el transporte; encuentra atractivos los planes b que harían los locales porque no se quiere ver como un extranjero; y aprecia los destinos internacionales porque los encuentra cada vez más asequibles.

Sin embargo, el desarrollo de esta categoría no debe ni puede estar atado exclusivamente a las características de la misma, sino que también depende de factores del mercado que le permitan incubarse y crecer. Algunas de estas condiciones son el aumento de la conectividad con destinos internacionales, la ampliación de oferta turística no tradicional y una mayor variedad de opciones que les permitan escoger entre aerolíneas, hoteles y planes de manera libre. Además, para el país es fundamental que esta categoría de viajero continúe en expansión para así poder elevar las cifras de personas que aportan a la industria cuando compran un tiquete o invierten en destinos.  

El turismo representa cerca de 6,1% del PIB en Colombia, según lo revelado por el Estudio de Turismo del Centro de Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard. Entonces ¿por qué no apostarle a esta industria? Los diversos competidores del sector debemos acercarnos a los usuarios para saber qué es lo que realmente quieren. Cautivar a esta nueva categoría de viajero es clave para elevar las cifras en el país. Solo dos de cada 10 colombianos han viajado al exterior y la tasa de viajes en avión es tan solo de 0,5 viajes per cápita.

En Colombia, ha nacido un nuevo viajero que sí quiere volar, entonces ¿por qué no unirnos y hacer que más personas surquen los cielos y descubran los mejores destinos del mundo de la forma en la que verdaderamente lo quieren hacer?