Consumo

Una mirada a Hernando Trujillo

Diana Marcela Torres Rodríguez

Cuando se presenta la celebración de fechas especiales, como consumidores que somos, siempre queremos ser los mejores anfitriones, comprar lo mejor que hay en el mercado y, adicionalmente, proyectar la mejor imagen durante ese evento especialmente a las personas que nos acompañan.

A finales de septiembre, mi hermano recibiría su grado universitario, por lo que durante ese mes me dediqué a acompañarla constantemente para que comprara el vestido para su ceremonia.

Nos dirigimos al Centro Comercial Santafé. Él ya tenía muy claro las especificaciones de lo que quería para su graduación, así que nos dispusimos a buscar en todos los almacenes que se encuentran en ese establecimiento.

Desafortunadamente, no encontramos un vestido que satisfaciera sus necesidades, en especial porque es un hombre alto y no encontrábamos algo que se ajustara a su medida. Inicialmente, no contábamos con la opción de entrar a los almacenes de la marca Hernando Trujillo por el presupuesto que teníamos, sin embargo, en un último intento por encontrar lo que queríamos decidimos entrar a un local de esta reconocida cadena.

En el momento que entras al almacén encuentras de inmediato un saludo cordial por parte de los asesores. A simple vista me di cuenta que habíamos tomado una muy buena decisión y no nos arrepentiríamos de adquirir cualquier artículo allí.

Encontramos gracias al permanente asesoramiento de un vendedor el vestido que tenía todas las características que esperábamos encontrar. Así mismo, puedo destacar de esta visita que nos dieron todas las soluciones para tener el vestido a la medida de mi hermano en tiempos muy cortos. Además, logramos permanecer en el almacén sin presiones, cómodos y satisfechos.

Con gran fortuna nos llevamos a precios muy accesibles todas las prendas en la misma tienda, sin necesidad de buscar en otro lugar. Sin dudarlo compramos todo en Hernando Trujillo. Fue tan agradable y completa su asesoría, que permitió que la compra fuera exitosa en un 100%. Durante tres fines de semana continuos estuvimos después de la compra en el almacén, en toma de medidas, ajustes y demás, y siempre nos recibieron con la mejor actitud y amabilidad. Sorprendentemente recibimos mucho más de lo esperado, pues también nos dieron un bono para seguir adquiriendo sus productos.

Gracias a todo esto, mi hermano quedó totalmente satisfecho por su compra e hizo que tuviéramos una excelente celebración.