"El alza del precio del diésel es un proceso gradual para sanear las finanzas públicas"

El ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, aseguró que el incremento del diésel decretado por el Gobierno es parte de una estrategia para desmontar el esquema de subsidios y sanear las finanzas públicas.

"De alguna manera lo que se está haciendo es limpiar las finanzas de una ayuda que era insostenible. Es un proceso de desmonte de un subsidio para sanear las finanzas públicas, para ir garantizando que tengamos mayor responsabilidad fiscal, que este impacto que se está teniendo por los combustibles fósiles, especialmente el diésel en este momento, es cerca de 50% subsidiado", aseguró Camacho.

Según las estimaciones, mantener el subsidio hasta diciembre costaría alrededor de $1,6 billones.

El titular de la cartera energética agregó que este desmonte también facilitaría la transición energética. "Mientras mantengamos subsidios, pues eso va a ser más difícil que podamos avanzar en otras tecnologías", puntualizó.

En medio de la conversación, Camacho aseguró que el déficit del Fondo de Estabilización del Precio del Combustible, Fepc, era de $80 billones, una cifra mayor a la que se tenía calculada de cerca de $32 billones.

El funcionario agregó que el resto de los incrementos, se estiman que sean dos más, podrían prolongarse en el tiempo, toda vez que se debe calcular el impacto real del aumento en el corto y mediano plazo.

"Creo que es parte de lo que se debe ir revisando; monitoreando de cómo se comportan los precios, de cómo vamos avanzando en todo este proceso de estabilización económica del país pero, por supuesto, es el Ministerio de Hacienda quien nos dará esos ritmos y tomará esas decisiones de cómo va revisando la sostenibilidad fiscal del país", aseguró Camacho,