Armada y comunidades del Pacífico retoman discusión sobre subestación de Gorgona

Aunque una de las banderas del Gobierno, en particular de la vicepresidenta Francia Márquez, era la de detener la construcción de la subestación de la Armada Nacional en Gorgona, esta continúa. El debate se centra en que para algunos se trata de un asunto de Seguridad Nacional, pues la ubicación de la isla es clave para combatir de manera estratégica el narcotráfico. Mientras que para las comunidades y algunos comités científicos, construir esta infraestructura puede ser perjudicial para la biodiversidad de la zona.

Precisamente, hoy y mañana se realizarán mesas técnicas en las que harán parte representantes del Gobierno, de la Armada Nacional, comunidades y académicos. Con esto se quiere poner en discusión entre las partes aquellas inquietudes sobre el impacto que tendrá esta subestación en la zona y, con esto, determinar si se pausa o se continua la construcción.

¿En qué va la construcción de la subestación en Gorgona?

En enero ya se había presentado un avance importante en la construcción de la infraestructura. Lo subestación que se quiere implementar en el sector de "El Poblado" contempla una estación de guardacostas con su bloque operativo, administrativo, comedor, cocina y alojamientos, un muelle marítimo, una torre de radar y sendero de acceso a las instalaciones.

Su construcción se planeó en tres fases; la primera consiste en una torre radar la cual ya se encuentra terminada, su construcción inició en junio de 2019. La segunda se trata del levantamiento del muelle, el cual ya tiene un avance de 15%. La tercera fase se trata de las viviendas, la cual ya tiene 2% de avance. Cabe precisar que estos porcentajes son con corte a enero de este año, pues la Armada afirmó que en los últimos meses sí se han presentado avances, pero estos no son significativos.

Antes de detallar qué dice cada una de las partes en este debate, se debe dejar claro que el proyecto inició en 2010, es financiado con cooperación internacional y, aunque desde el primer momento despertó polémica ambiental, la Anla le otorgó licencia ambiental con la resolución 1730 de 2015.

¿Por qué se oponen las comunidades?

Aunque la Armada argumenta que solo utilizarán 2% del área impactada del sector "El Poblado", para mitigar el impacto ambiental, las comunidades han mostrado preocupación por una posible afectación a la biodiversidad de la zona. Por esto se han organizado bajo movimientos como el "Colectivo Unidos por Gorgona", "Comité Salvemos Gorgona", entre otros. Sumado a las comunidades se encuentra el "Comité Científico Parque Nacional Natural Gorgona", el cual ha enviado cartas públicas al Gobierno dando a conocer sus inquietudes sobre el proyecto.

Estos grupos han resaltado que la isla tiene una gran riqueza en biodiversidad, pues según datos de Parques Nacionales Naturales (PNN), la Isla Gorgona cuenta con 61.685 hectáreas de área protegida y es hogar de una amplia diversidad de flora y fauna. En el lugar se registran 381 especies de peces, 155 especies de aves, 35 reptiles, siete anfibios y por lo menos 430 tipos de plantas, de las cuales 4% son endémicas.

Juan Armando Sánchez, integrante del Comité Científico Parque Nacional Natural Gorgona, comentó que "el problema realmente inició cuando la Anla otorgó una licencia. Para hacer esto no hubo una consulta previa con las comunidades ni con los comités científicos". Sánchez argumenta que para dar la licencia no tuvieron en cuenta que básicamente el proyecto va funcionar como una estación de gasolina para navíos nacionales y estadounidenses. "Ese goteo de gasolina va a tener un efecto acumulado con un impacto tóxico para todos los animales. Es decir, esto tiene un efecto contra la biota marina, que no se están teniendo en cuenta".

El comité científico ha venido presentando sus inquietudes desde hace unos años, en noviembre de 2022 enviaron una carta directamente al Gobierno Nacional. Es esta exponen que "la vocación para la conservación de la biodiversidad terrestre y marina de Gorgona no es compatible en absoluto con la presencia de una
instalación militar". Sobre las propuestas Sánchez argumentó que " Colombia tiene 1.300 kilómetros de costa en el Pacífico; sin embargo , ya existen bases en Buenaventura, Málaga y Tumaco. Nuestra propuesta es que esa base se haga en cualquier otro lugar de la extensión de la costa, no en un Parque Natural".

¿Qué responde la Armada Nacional?

Desde la Armada Nacional se asegura que la localización del proyecto es estratégica, no solo para controlar las rutas del narcotráfico, sino también los delitos ambientales. También hay que precisar que, si bien las comunidades afirman que no hubo consulta previa en el momento en que la Anla otorgó la licencia, la Armada asegura que sí se llevaron a cabo socializaciones a medida de que el proyecto iba avanzando.

Para contextualizar, hay que aclarar el área de jurisdicción marítima con que cuentan las Fuerzas Armadas. En total tiene 928.000 kilómetros cuadrados, de los cuales 304.000 kilómetros cuadrados son áreas marítimas protegidas, y 58% de esta última área se encuentra en el Pacífico.

"Más de la mitad de las áreas marítimas protegidas del país se encuentran en el Pacífico", comentó Javier Bermúdez Echavarría, Capitán de Navío y Comandante de Guardacostas de la Armada de Colombia. La Guardia Costera cuenta con tres estaciones en la región del pacífico colombiano; en Bahía Solano, Buenaventura y Tumaco. "Entre Buenaventura y Tumaco no existe una estación de guardacosta para ejercer control en las áreas jurisdiccionales", dijo.

Por eso, para el Capitán de Navío la localización del proyecto es clave para aumentar el control sobre delitos como el tráfico de fauna, deforestación y pesca ilegal. Entre 2012 y 2022, en el área del Pacífico se han incautado 157.778 kilogramos de pesca ilegal, 115.742 mts3 de flora, 218 unidades de maquinaria de minería ilegal, 3.082 personas rescatadas y 531 individuos de fauna silvestre.

Por esto, con este proyecto desde la Armada se pretende fomentar la seguridad ambiental, que está enfocada a contribuir con la protección de los mares y ríos, la prevención de la contaminación, la lucha contra el tráfico ilícito de especies, el control de la explotación irracional de recursos que afecta el medio ambiente y la protección de las especies en peligro de extinción.

El Capitán sostiene, además, que el sector "El Poblado", zona donde se culminará la construcción, es un área de alta densidad de uso; lo cual mitigaría el impacto ambiental. "Nosotros como Armada Nacional vamos a usar solo 2% del área impactada de El Poblado", comentó.

Aunque en el momento no hay restricciones jurídicas o técnicas para el desarrollo de la subestación, hasta el 12 de abril se llevarán a cabo mesas técnicas en Guapi, Cauca, para poner en discusión los argumentos de cada una de las partes. Los comités también tienen preparadas manifestaciones, pues buscan que se pare la construcción del proyecto.