Economía

Atentados a las petroleras le pasaron factura a la inversión extranjera directa

María Alejandra Sanchez Pedraza

La Inversión Extranjera Directa (IED) cayó 8,4% en el primer semestre del año. La desaceleración del sector de petróleo y minas entre otras cosas por los atentados a la infraestructura petrolera y minera, los bajos precios del carbón, los conflictos laborales y la falta de capital humano le están pasando factura a este renglón.

Sin embargo, por ahora no hay peligros macroeconómicos, pues se mantiene en máximos históricos y la inversión de portafolio está compensando la caída. La inversión foránea en este rubro aumentó un 127,6% a US$6.265 millones con respecto a igual periodo del año pasado.

Desde 2012 se empezó a ver una disminución de la IED en los primeros meses del año y aunque en 2013 terminó con un leve crecimiento, este año se espera que cierre en alrededor de US$16.000 millones, por debajo de los US$16.355 millones registrados el año pasado.

Entre enero y junio, la inversión de largo plazo se ubicó en US$8.016,4 millones, mientras que en el mismo periodo de 2013 estaba en US$8.753,2 millones debido a una disminución de 7,3% en petróleo y minas, que representa 83% de los dineros que ingresan al país, y una caída de 13% en los otros sectores, de acuerdo con la balanza cambiaria del Banco de la República.

Daniel Velandia, director de investigaciones económicas de Credicorp Cápital, indicó que la actividad petrolera está llegando a una etapa de maduración, en la que ya se hicieron los desarrollos de los grandes campos, por lo que es de esperar “flujos menores o estables”. Para expertos, esto no significa que el país sea menos atractivo, sino que se trata de una estabilización en los niveles históricos. Pero la falta de diversificación de la IED podría traer consecuencias a largo plazo.

Para Carlos Ronderos, exministro de Comercio, el problema está relacionado con la falta de capital humano calificado en el país, lo que se ha convertido en un verdadero cuello de botella.

Indicó, además, que muchas de las compañías llegan a Colombia para tener una base para exportar, pero los niveles de apertura en el país aún son bajos.

En las cuentas macro la IED está financiando el déficit en cuenta corriente, que en el primer trimestre de 2014 llegó a US$4.015 millones, es decir 4,6% del PIB, un aumento de 1% con respecto al mismo periodo de 2013. Camilo Pérez, director de investigaciones económicas del Banco de Bogotá, explicó que por ahora no hay riesgo porque la caída de la IED aún no es significativa y supera con creces el rubro con cifras en rojo.