Cerca de 180 cuerpos son cremados al día en los 13 hornos crematorios de Bogotá
sábado, 19 de junio de 2021
Según la Secretaría de Salud, aunque las cifras de decesos ha sido alta, no hay colapso en los servicios funerarios de la ciudad
Rubén Darío Ocampo Camargo
El secretario de Salud de Bogotá, Alejandro Gómez, aseguró que, en promedio, cerca de 250 personas han fallecido diariamente en la ciudad durante este pico de la pandemia. Esta cifra corresponde a decesos por covid-19 y por otras causas. Por esa razón, la Administración Distrital informó que a pesar de estos números, la capital cuenta con capacidad suficiente para continuar todas las labores de cremación y conservación de los cuerpos de las personas que han muerto.
“No estamos en ningún caso con una capacidad copada. Tenemos capacidad todavía para la disposición final de fallecidos tanto en cremación como en inhumación, pero adicionalmente tenemos contenedores de frío en los que aún hay disponibilidad. Pese al pico epidemiológico actual, nuestra capacidad para disponer restos mortales en Bogotá es completamente suficiente”, indicó el secretario Gómez López.
Según el Distrito, la ciudad cuenta con 13 hornos crematorios, de los cuales siete son privados y seis son públicos. Estos últimos tienen una capacidad para cremar máximo 180 cuerpos diarios.
“Igualmente, de ser necesario, se cuenta con ocho contenedores refrigerados con capacidad de albergar, en total, 360 cuerpos”, añadió Gómez.
El secretario de Salud aseguró que en los contenedores de la Uaesp se encontraban albergados 200 cuerpos cuya disposición se atendió en las últimas horas, y aseguró que, aunque sí existe congestión, aún hay capacidad suficiente de almacenamiento en los contenedores refrigerados.
“Es importante mencionar, además, que el servicio de cremación es dinámica y opera en forma de fila, razón por la cual se amplió la capacidad de almacenamiento para avanzar progresivamente en la disposición final de los cuerpos”, agregó.
Finalmente, desde la alcaldía de la capital aseguraron que los primeros hornos crematorios en ocuparse son los públicos porque tienen una tarifa más baja que la privada. Sin embargo, Gómez reiteró que todavía no hay un colapso en ninguno de los servicios funerarios que se ofrecen en la ciudad.