Colombia buscará nuevos recursos para mitigar emisiones de CO2 al medio ambiente

Del 31 de octubre hasta el 12 de noviembre de este año se desarrollará la cumbre climática COP 26 en Glasgow, Escocia, evento que reunirá a líderes de 197 países para exponer y establecer resultados y compromisos concretos que contribuyan a la crisis mediambiental por la que atraviesa el planeta.

De cara al encuentro, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Carlos Eduardo Correa, afirmó que el país tiene el plan de buscar recursos hasta por US$100.000 millones con miras a mitigar la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) y reducirlas en 51% para 2030.

Así, en la siguiente década se dejarán de emitir 176,8 millones de toneladas de CO2 y, para 2030, se generarían máximo 169,4 toneladas en todo el territorio nacional.

Y si bien Colombia solo es responsable de 0,6% del total de las emisiones globales, lo cierto es que es uno de los 20 países más propensos a tener daños mediambientales en sus ecosistemas, por lo que el jefe de la cartera explicó que los recursos que se obtengan irían dirigidos a líneas de acción de las Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC).

Estas contribuciones se componen de 196 acciones (30 de adaptación ambiental) en frentes como energía, movilidad, ambiente y agricultura, donde a corte de hoy ya se registran avances en temas como la restauración de 116.000 hectáreas, reducción de 30% en deforestación y la siembra de 70 millones de árboles.

En este punto, de no trabajarse aspectos como la adaptación, el costo que asumiría el país sería cercano a $4 billones anuales, de acuerdo con los cálculos del ministerio.

Sin embargo, Correa enfatizó en que para lograr el objetivo, es necesario un marco regulatorio adecuado, destacando así la radicación de la Ley de Acción Climática en el Congreso.

“El proyecto es la incorporación de las NDC a la ley, una estrategia a 2050 que establece parámetros mínimos como objetivo”, dijo el ministro.

Este proyecto de ley busca crear medidas mínimas a corto, mediano y largo plazo que permitan alcanzar la carbononeutralidad en 2050, es decir, que se emita la misma cantidad de CO2 que se puede capturar.

Por ejemplo, dentro de las metas se propone declarar 30% de los mares y áreas continentales bajo la categoría de protección; la restauración ecológica de 962.000 hectáreas; alcanzar 600.000 vehículos eléctricos en circulación; reducir 15% del consumo de energía de la industria; reutilizar 10% de las aguas residuales domésticas; y reconvertir a sostenibles 230.000 hectáreas de cultivos de cacao.

Junto con estas acciones, durante la cumbre también se aguarda por la conclusión de las negociaciones para aplicar plenamente al Acuerdo de París, decidir sobre los Planes Nacionales de Adaptación e iniciar deliberaciones sobre la nueva meta colectiva cuantificada de financiamiento climático.

Carolina Montes, docente investigadora del departamento de Derecho del Medio Ambiente de la Universidad Externado, resaltó la importancia de la cumbre y los posibles recursos, y explicó que Colombia ha asumido grandes compromisos ante la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (Cmnucc) en cuanto a la reducción de emisiones de GEI, razón por la que ha sido reconocida internacionalmente.

Por su parte, el ambientalista Ernesto Guhl, explicó que la cumbre de Glasgow puede ser muy importante para el mundo si se logran compromisos sólidos para reducir las emisiones de GEI por parte de los grandes productores como China y Estados Unidos, principalmente.

Respecto a Colombia, “puede ser útil si se logran compromisos de apoyo tecnológico y financiero para volver realidad la transición energética y de ayudar a las víctimas de los efectos del cambio climático. Detener la deforestación debe tener alta prioridad”, aseguró Guhl.

A su turno, Daniela Bernal Díaz, bióloga ambiental, resaltó que se deben tener en cuenta aspectos como el alto nivel de inundaciones.

Las apuestas para alcanzar la resiliencia socioecológica y climática a 2050

Como parte de la estrategia climática de largo plazo, Colombia propone nueve apuestas que tienen como fin facilitar la carbononeutralidad.

Destacan objetivos como la gestión integral de la biodiversidad, el fortalecimiento del conocimiento climático, la producción y consumo sostenible y el incremento en la capacidad de adaptación de la población. Para alcanzar los cometidos, el Ministerio de Ambiente reveló que en los siguientes meses abrirán espacios como el Centro de Biodiversidad y Clima.