Expertos advierten que el país podría ser importador de gas a 2026 y de crudo a 2028
viernes, 4 de agosto de 2023
En mayo la ANH advirtió que hay reservas de petróleo y gas para hasta 7,5 y 7,2 años. Con la transición energética, el país podría volverse importador antes de lo previsto
El Ministerio de Minas y Energía dio a conocer cuatro documentos que conforman la Hoja de Ruta de la Transición Energética, sobre los cuales se recibirán comentarios hasta el próximo 16 de agosto.
En la Hoja de Ruta se detalla el nivel de reservas en barriles de petróleo y terapies cúbicos de gas, que es de 7,5 años y 7,2 años respectivamente.
Según advierten expertos, Colombia podría convertirse en un importador de gas y crudo en el corto plazo. La razón es que ante la reducción de reservas, que ya había señalado la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y el incremento en la demanda que habrá para 2050, Colombia no podría ser autosuficiente.
Sobre la Hoja de Ruta, Amylkar Acosta, exministro de Minas y Energía, explicó que “lo que se denota en los documentos que publicaron para comentarios es que “no hay nada nuevo que no esté en el PND y ninguna novedad proveniente del ejercicio que se hizo con los llamados diálogos vinculantes”.
Agregó que “son la reiteración de la posición defendida desde el MME de limitar al sector extractivo, con la salvedad de los minerales estratégicos, sin los cuales no será posible la Transición Energética Justa”.
Cabe aclarar que estos minerales estratégicos son el cobre, cobalto, litio, molibdeno y níquel. Colombia solo produce este último.
De acuerdo con el informe de reservas a 31 de diciembre de 2022, en términos de petróleo Colombia cuenta con 2.074 millones de barriles de reservas probadas, 792 millones de barriles de reservas probables, y 633 millones de barriles de reservas posibles. En cuanto a gas, el país cuenta con 2,82 terapies cúbicos de reservas probadas, 0,65 terapies cúbicos de gas en reservas probables, y 0,75 terapies cúbicos de gas en reservas posibles.
Respecto a esto, Acosta señaló que “las precarias reservas probadas de petróleo y gas con las que cuenta el país solo alcanzan para ocho años de autoabastecimiento. Y la única manera de evitar su importación, es incorporando más barriles de petróleo y más pies cúbicos de gas a las reservas e intensificando la actividad exploratoria”.
Agregó que hay que tener en cuenta que en Colombia el éxito como proporción de pozos perforados no supera 20% y desde el descubrimiento de petróleo en Caño Limón los hallazgos recientes son yacimientos muy pequeños.
Aunque en algún punto la economía sí debe dirigirse a la descarbonización, Sergio Cabrales, profesor de la Universidad de los Andes, enfatizó en que la hoja de ruta tiene las metas trazadas a 2050, pero antes se acabarán las reservas y, por eso, antes se deberá recurrir a la importación. “Según la Hoja de Ruta, se prevé que Colombia se convierta en un importador neto de gas natural después de 2026, ya que las reservas domésticas comenzarán a declinar fuertemente, mientras que la demanda continuará aumentando. Tendremos que importar, en el caso del gas, por medio de la regasificadora de Cartagena”.
De acuerdo con el experto, “en el escenario de Transición Energética Justa (TEJ), la demanda de combustibles derivados del petróleo se reducirá en 50% para 2050, especialmente la gasolina y diésel”. Y aunque el Gobierno ha venido trabajando por potenciar el uso del gas, Cabrales reiteró que “las reservas no son suficientes”.
El experto indicó que la hoja de ruta está trazada con plazo a 2050. Sin embargo, se prevé surja antes la necesidad de demandar energías convencionales, lo que llevaría a la importación. También hizo la salvedad que en el documento se habla del fortalecimiento de energías limpias, como la eólica y solar, lo cual podría representar una oportunidad para reducir la necesidad de hidrocarburos en la balanza comercial.