Con US$25 millones se instalará la primera zona franca educativa
miércoles, 24 de septiembre de 2014
Cinthya Ruiz Granados
El próximo año se instalará en el país la segunda zona franca educativa del mundo. Este modelo de negocio se ha vuelto atractivo para los inversionistas gracias a las exenciones tributarias y la estabilidad jurídica que encuentran en Colombia.
Mónica Leyva, presidenta de Edupol, empresa que montará la zona franca vía satélite, le contó a LR que en el país se instalará la sede para el habla hispana y que ya están concretando convenios con universidades en el exterior para que se instalen en el espacio que abrirá en 2015.
¿Cómo será la operación?
Vamos a estar instalados en la Zona Franca Metropolitana que queda en Cota (Cundinamarca). Se operará toda la parte de habla hispana con una expansión de 17 países. Estamos trabajando con las alianzas de los otros países.
¿Por qué se crea este negocio, qué lo hace rentable?
Los dueños brasileños consideran que la estabilidad jurídica que tiene Colombia les permite hacer una inversión con tranquilidad. El mercado brasileño es complicado en temas jurídicos y la estabilidad no es muy grande, entonces con un análisis tomaron la decisión de invertir en Colombia.
¿Por qué en Colombia se optó por una zona franca?
Porque tiene muchos beneficios tributarios que permite la exportación de los servicios educativos a todos los países; no tenemos que contar con toda esa infraestructura para operar.
¿Cuáles son los beneficios tributarios que les ofrecieron?
En temas de infraestructura, hay que importar muchos materiales, son 8.000 metros cuadrados de construcción con 17 estudios de televisión, al no tener que pagar ni aranceles ni IVA, la construcción sale más económica. Y en cuanto a tecnología, la importación de cámaras, luces, máster, equipos de transmisión y recepción, no se nacionalizan, no salen del territorio de la zona franca y finalmente bajarán los costos de producción.
¿Cuál era la diferencia en costos entre instalarse o no en la zona franca?
Estamos ahorrándonos 25% de una inversión de US$25 millones. Adicionalmente, cuando prestemos el servicio a otros países no tenemos que facturar IVA, el impuesto de renta favorece para ser más competitivos.
Hablemos un poco más del funcionamiento en la zona franca.
Vamos a invitar a 21 universidades a que monten toda su infraestructura, consiste en hacer un satélite de la universidad. Ya trabajamos con la Universidad de Manizales, la Universidad Autónoma de Bucaramanga, Universidad Tecnológica de Bolívar, la Universidad Jorge Tadeo Lozano y la Iberoamericana colocando la oficina con decanos y personas de registro. Ellas serán las primeras dentro de la zona franca y lo mismo va a pasar con las universidades de afuera que quieran instalarse en Colombia y ofrecer un programa. Se instalan aquí y desde Cota se trabaja bajo un sistema polimodal, que combina medios con teleclases con el profesor y en los municipios estarán las personas recibiendo la clase.
¿Qué universidad del exterior está interesada en llegar?
La Universidad Politécnica de Costa Rica operará en 2015. Van a traer profesores costarricenses para que puedan dictar las clases, nuestro método es que la persona vaya a un salón de clase y se le dicta vía satélite para que haya interacción con otros alumnos.
¿Esto no es solo para educación superior?
No, acá también realizamos programas de nivelación de matemáticas, lenguaje, capacitación para las pruebas Pisa.
¿Cuánto personal operará en la zona franca?
Vamos a contratar a 1.000 personas, calificadas por el tipo de servicio.
¿Qué tan dispuestas para entrar a la zona franca están las universidades más prestigiosas del país?
Lo que hemos logrado a hablar con ellas es que dependiendo la organización tienen un foco distinto. Por ejemplo, la Universidad Javeriana tiene la intención de expandirse a poblaciones vulnerables.
¿Cuánto puede costarle a un estudiante pagar por este servicio?
Un semestre por la enseñanza satelital puede estar en $1.500.000, contamos con muy buena calidad. Y esperamos que de aquí a 2020 tengamos 100.000 estudiantes en educación superior graduados en 400 municipios del país.