Economía

Confianza del consumidor perdió cerca de dos puntos en diciembre

Lilian Mariño Espinosa

El Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) mensual registrado por Fedesarrollo se situó en diciembre en 22,4%, dato menor al registrado en noviembre, 24,7%, y al de diciembre del año anterior, 23,2%.

Este índice busca evaluar las expectativas de los hogares para para 2015 basándose en cómo ven la economía personal y nacional actualmente y qué esperan para los próximos 12 meses.

Para el economista y director de posgrados de la Universidad del Rosario, Gonzalo Palau, la caída de este índice en el último mes de 2014 es evidencia de la pérdida de optimismo que se tenía sobre la economía colombiana antes del último trimestre del año. “Las previsiones de crecimiento para 2015 se han revisado a la baja, hablábamos antes de un crecimiento de 4,5% y 5% y ahora la revisión es de si acaso 4%. Esto es resultado del conflicto con los precios del petróleo, algo que no afecta a los hogares directamente, pero que altera las noticias que llegan al consumidor y cambian sus expectativas”.

Por lo tanto este índice es parte del reflejo del periodo enrarecido por el cual ha pasado la economía desde el cuarto periodo del año anterior, básicamente en el mes de diciembre.

Por ciudades, el comportamiento del ICC sin embargo es heterogéneo, por ejemplo, mientras que para Bogotá y Barranquilla hay una recuperación de algunos puntos de confianza, Medellín cae, tanto en términos mensuales como anuales casi 18 puntos. Por su parte Cali se mantiene en su nivel promedio.

Vale la pena recordar que en el mes de septiembre y noviembre del año anterior, Medellín había experimentado un gran aumento en el índice de confianza además de un aumento en la disposición para la compra de vivienda.

Con la caída de este índice, el cual muestra qué tanto podrían consumir o no la personas este año, y al “ser el consumo dos terceras partes de la demanda agregada del país, las cifras mostrarían que esta desconfianza se traduciría en menos compras y afectaría la producción de la industria” comenta Palau, quien de igual manera agrega que “a pesar de que este panorama son expectativas y no significa que se vaya a a evidenciar una caída hay que tener en cuenta que estas probabilidades son fundamentales en la marcha de las economías y si por consiguiente estas no son buenas podrían generar una caída del consumo.

Finalmente, la disminución en el índice se concentró en los niveles socioeconómicos alto y bajo, y fue parcialmente contrarrestada por una mejora en el nivel socioeconómico medio.