Conteo regresivo para cerrar negocio de Electricaribe según la agenda del Gobierno
viernes, 21 de agosto de 2020
El 30 de septiembre se deberían “entregar las llaves” de la operación de la electrificadora a EPM y al Consorcio Energía de la Costa
Faltan dos puntos neurálgicos entre EPM y el Consorcio Energía de la Costa (compuesto por Latin American Corp y la Empresa de Energía de Pereira) para asumir finalmente la operación que les fue adjudicada de Electricaribe el próximo 30 de septiembre. Estos dos temas tienen que ver con el incremento de las pérdidas en el servicio de energía en la Costa y el rezago en la facturación de los clientes; dos aspectos que han desmotivado a los consorcios en la entrada al negocio, que se ha tornado más caro de lo que era.
Hay que recordar que desde el 20 marzo quedó pactado que EPM (Caribe Mar), y el Consorcio Energía de la Costa (Caribe Sol) pasarán a atender 2,7 millones de usuarios que hoy en día tiene la electrificadora que tuvo que ser intervenida. Ese día también se conoció que la adjudicación de los activos duró un año de proceso, y que hubo cuatro prórrogas en la fecha de la subasta.
La agente especial de Electricaribe, Ángela Patricia Rojas, dijo en su momento que con la adjudicación quedó que los operadores invertirán $8,7 billones en los próximos 10 años por las tareas necesarias, (ver gráfico).
El lío está en que las pérdidas de la operación en Electricaribe se negociaron en la subasta por 30%, pero hoy ascienden a 38%; mientras que la facturación cuando se hizo el acuerdo alcanzaba 70% y por los efectos de la pandemia cayó a 48%. Algo que hace difícil cumplir con la meta de los interventores, de entregar los niveles de pago de servicio en 80%. LR consultó a la Superservicios, pero dijeron que no se pueden pronunciar, pues “son temas contractuales reservados”.
El Gobierno ha invertido durante 18 meses $3,4 billones para atender a la región Caribe en su servicio de energía, pero este es un ritmo que no se puede sostener en medio de la grave situación fiscal, por lo que hay urgencia para cerrar la entrega de la operación.
EPM, que ha tenido problemas frente a su gobierno corporativo, se ha parado en la raya, pues dice que las condiciones han cambiado y los problemas de pérdidas y facturación se deben arreglar para continuar con el negocio.