Conversión de vehículos de gasolina a gas aumentó 62,66% durante el año pasado
martes, 23 de enero de 2024
Según Asociación Colombiana de Gas Natural, Bucaramanga, Bogotá y Barranquilla fue donde más conversiones se hicieron
La Asociación Colombiana de Gas Natural, Naturgas, publicó un informe en el que asegura que la conversión de vehículos a de gasolina a gas natural vehicular (GNV) aumentó en 62,66% el año pasado.
Según el gremio, se pasó de 14.372 vehículos que pasaron de gasolina a gas en 2022 a 23.378 en 2023. Además, señaló que Bucaramanga, Bogotá, Barranquilla, Medellín y Bucaramanga fueron las ciudades con más vehículos convertidos a gas natural con aumentos de hasta 196% respecto al año 2022.
El informe también señala que 342 vehículos nuevos con motores dedicados a Gas Natural Vehicular ingresaron al mercado el año pasado. De ese total, 310 corresponden a camiones de carga pesada con capacidad de más de 10,5 toneladas.
Esto significó un incremento de 20% frente a 2022, mientras que para vehículos de carga de menos de 10,5 toneladas, el incremento fue de 50%
“El gas natural es un energético clave dentro del proceso de transición energética en el país, desde Naturgas estamos convencidos de que el momento del gas natural vehicular es ahora. Esta industria ha tenido gran interés en el desarrollo de este energético en el sector transporte por los grandes beneficios económicos y ambientales, posicionándose como la mejor alternativa, tanto en segmento de carga como en transporte de pasajeros” dijo Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas.
Según estimaciones del gremio, si se moderniza solo 3% de la flota de transporte de carga pesada del país a gas natural, el Gobierno se ahorraría $346.000 millones cada año del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, Fepc.
También proyecta que un taxista se puede ahorrar hasta $1,5 millones al mes si se cambia al gas natural, teniendo en cuenta que usar GNV en lugar de gasolina representa un ahorro económico de 52%.
En cuanto al impacto ambiental, Naturgas también prevé que el cambio puede representar una reducción de hasta 94% del material particulado emitido al ambiente y una disminución de hasta el 34% en dióxidos de carbono, una reducción un poco menor a la de los vehículos dedicados que reducen 99% en material particulado y 50% en dióxido de carbono respecto a la gasolina.