Economía

Cosecha cafetera necesita de 300.000 recolectores que no ha logrado atraer

Paula Delgado

Solo para este semestre se necesita de 300.000 cosechadores para recoger la producción más importante de ocho departamentos, sin embargo, en 38 municipios que componen la región se ha advertido la deficiencia de colaboradores, lo que pone en peligro los más de 12 millones de sacos de café que obtienen cada año, pues la producción del sur del país representan entre 45% y 55% de la cosecha anual (la mitad la aportan Huila y Tolima). 

Un sondeo realizado por LR permitió establecer que al jornalero se le pagan entre $400 y $500 por kilo y puede recoger en promedio 80 kilos aunque hay quienes superan los 150 kilos durante su jornada diaria. Además, un cálculo de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), estima que por cada hectárea se requiere de 1,1 cosecheros, cifra que se incrementa según la productividad de los árboles sembrados. 

Además, LR pudo establecer que la llegada de proyectos de infraestructura desplazaron la mano de obra hacia actividades mejor remuneradas y con contratos que brindan seguridad social. 

Sin embargo, contrario a lo que se cree el dinero no es el factor que más pesa en la decisión de los jornaleros. Según la FNC, un cosechero se inclina por una oferta si sabe que recibirá buen trato y tendrá buenas relaciones personales con los propietarios. 

Carlos Armando Uribe, gerente técnico de Fedecafé, aseguró que “el parque cafetero de hoy está muy desarrollado y su productividad seguirá subiendo”, lo que lleva a pensar que el problema podría agravarse. 

Los voceros cafeteros señalan que si bien se trata de una actividad dura, opinan que no es mal remunerada. Sin embargo, reconocen que parte del problema estructural está en que no se ha podido establecer con el Gobierno, pese a que existen propuestas, un esquema para la formalización laboral. Esto ha provocado que quienes se dedicaban a este oficio migraran a la ciudad en busca de un empleo que les garantice seguridad social. 

Se calcula que dado el incremento en productividad cafetera, a pesar de que se siguen contando 550.000 familias con 950.000 hectáreas (de las cuales 95% están tecnificadas y 66% son resistentes a la roya) el número de jornaleros que se requieren es mayor: 650.000 personas cuando en 2013 se reportaban 500.000. 

La preocupación entre los propietarios de fincas es latente porque esta situación presiona al alza los precios que se pagan al recolector hasta en 37%. 

Los reportes de cafeteros en Caldas, Quindío, Risaralda y Antioquia, indican que en esta zona central se requieren unos 60.000 cosecheros de otras regiones del país para atender los picos de la recolección, pero les estarían faltando más de 20.000 personas. 

Específicamente Caldas requiere de unos 10.000 recolectores, pero según el representante de este departamento en el Comité Nacional de Cafeteros (CNC), Eugenio Vélez, en algunos sectores, como el centro, están absorbiendo 50% o 60% de la mano de obra que necesitan para la recolección. 

“La agricultura adolece de un esquema de formalización laboral. Mientras no lo tengamos será difícil atraer mano de obra. Hemos hecho varias propuestas presentadas en los Congresos Cafeteros, que se han enredado en el Gobierno, donde hay aporte del estado y del cafetero, y no ha salido nada”, dijo, haciendo referencia a un decreto de formalización laboral que dejaron listo pero que nunca firmó el Gobierno. La idea era que los trabajadores del campo pudieran acceder al esquema de Beneficios Económicos Periódico (Beps). 

En Antioquia, por su parte, se necesita de 35.000 cosecheros, pero hacen falta entre 10.000 y 12.000. “Las razones son muchas, pero una de las principales es la migración que hace la gente del campo a la ciudad buscando oportunidades, porque hasta los planes de vivienda del Gobierno se ofrecen en las ciudades. Aquí lo que hay es un abandono del campo por parte del Estado”, dijo Jorge Eliécer Sierra, exdirigente de Antioquia. 

Colombia tiene producción de café, prácticamente todo el año gracias al incremento en el área cultivada de ‘el nuevo eje cafetero’ (Huila, Cauca y Nariño). 
También hay más cosecha ‘mitaca’ 

A la problemática en el sur del país se suma el hecho de que la región central cafetera (Antioquia y Eje Cafetero) también está en periodo de cosecha y aunque tradicionalmente es inferior a la principal (mitaca) también ha venido en incremento por cuenta de la renovación de más de 3.200 millones de árboles. Sin embargo, hace algunos años no era difícil conseguir jornaleros en esta época de menor oferta, lo que demuestra que el problema se ha venido acentuando y que la actividad se está quedando sin quien recoja el café.

Las opiniones

Carlos Ignacio Rojas 
Presidente Ejecutivo de Asoexport 

“La mitad de los departamentos productores, especialmente en el sur del país, inicia periodos de cosecha entre marzo, abril y mayo que se extienden hasta junio”.

Carlos Armando Uribe 
Gerente técnico de la Federación Nacional de cafeteros 
“El café colombiano se caracteriza porque se coge grano a grano y ese es un símbolo de nuestra calidad porque garantiza que todas las cerezas están maduras”.