"De 25 millones de afiliados a Colpensiones y fondos privados, 15 millones no cotizan"

Esta semana ha sido clave para la construcción de las reformas laboral y pensional. Ayer tuvo lugar una audiencia pública para abrir el diálogo sobre la de la Cartera de Trabajo. Hoy el turno es de la reforma pensional, para la cual también se organizó una audiencia pública liderada por el Ministerio de Trabajo y los congresistas ponentes.

La reforma apunta a aumentar la cobertura, pues del total de 25 millones de afiliados entre Colpensiones y fondos privados, 15 millones no cotizan.

La audiencia inició con la intervención del viceministro de Pensiones Iván Jaramillo. El funcionario explicó que el documento se basa en el planteamiento de cuatro pilares; contributivo, semicontributivo, solidario y de ahorro voluntario. Con esto, el objetivo es garantizar el derecho a la pensión para vejez, enfermedad, invalidez y muerte.

Amparo a la vejez, invalidez y muerte

"Lo que se quiere es que progresivamente la gente vaya siendo estimulada para que vaya subiendo al sistema contributivo. Por eso tenemos modalidades como la pensión anticipada". Esta permitiría que una persona pueda empezar a tener ingresos de sus ahorros pensionales si cumplió la edad requerida, aunque solo tenga entre 1.000 y 1.300 semanas cotizadas. "Con esto se puede amparar la invalidez y muerte", agregó

Enfoque de género

La reforma también busca tener un enfoque de género que beneficie a las madres, mujeres, jóvenes y población diversa. El viceministro resaltó que en el artículo 36 se establece un beneficio para reducir hasta 50 semanas de cotización por cada hijo, lo cual aplicaría para las madres que tienen hasta tres hijos. "Así se quiere reconocer el trabajo y aporte de la economía del cuidado".

También está el artículo 32 en el que se definió la edad para la población no binaria sería la menor, es decir, 57 años. En el caso de la población transexual, las mujeres se pensionarán a los 57 y los hombres trans a los 62 años. Jaramillo recordó que "tenemos orden por la Corte Constitucional de reconocer la situación de personas no binarias y transexuales". Y agregó que "la reforma pensional está pensada para reconocer nuestra propia diversidad".

En el espacio también intervino Jaime Dussán, presidente de Colpensiones, quien resaltó que uno de los problemas que se debe atender es que Colombia tiene hoy una cantidad muy pequeña de pensionados y una cantidad muy grande de personas que no tienen posibilidad de pensionarse. "En cifras, nosotros tenemos 6,7 millones de afiliados, de los cuales cuatro millones (59%) no cotizan"

En el Régimen de Ahorro Individual (Rais) se tienen más de 18 millones de afiliados, de los cuales no cotizan 11,5 millones. "No es posible que los colombianos estén en la calle, de ahí la importancia de la reforma laboral, por que la gente no contribuye al sistema". Dio un dato enfático y es que entre Colpensiones y fondos provados hay un total de 25 millones de afiliados, de los cuales 15 millones no cotizan.

Los fondos privados

Para garantizar el derecho a la pensión como lo quiere la reforma, el diálogo con los fondos privados es clave. Por eso en la audiencia también participaron representantes de estas entidades. El presidente de Porvenir, Miguel Largacha Martínez, señaló que desde la industria se ha insistido en la necesidad de llevar a cabo una reforma integral de protección a la vejez que permita focalizar los subsidios en la población que realmente los necesita, en entregar más y mejores beneficios pensionales y en alcanzar un sistema que sea sostenible en el tiempo.

Largacha Martínez celebró algunos puntos como la reducción de los subsidios a las pensiones altas y la implementación de un sistema inclusivo. Sin embargo, advirtió que el proyecto no aumentaría la cobertura como se lo propone ante la alta informalidad. "En promedio, un colombiano solo cotiza 12 años, por lo que un mercado laboral robusto es fundamental para ampliar la cobertura pensional".

También insisten en que se debe reducir el umbral de cotización de tres salarios mínimos a un salario, pues considera que con esto se van a "minimizar los efectos del costo fiscal, el impacto en el ahorro privado y la permanencia de los subsidios. Los subsidios deben ir a quienes realmente lo necesitan, en función al monto del salario", concluyó.