Educación, salud y vías, con $720.000 millones adicionales en el presupuesto

El último año de Gobierno del presidente Juan Manuel Santos será de ajuste en inversión, de acuerdo con las cifras establecidas en el presupuesto para 2018.

Y es que en 2018 hay disponibles $235,6 billones, cifra que presenta una disminución en términos reales, teniendo en cuenta que el presupuesto del próximo año se incrementa 1% respecto al vigente en 2017 ($233,1 billones), ya que hay una expectativa de inflación de 4,1% para 2017. Esto quiere decir que el crecimiento presupuestal está por debajo del aumento de la inflación.

Mauricio Cárdenas, ministro de Hacienda, dijo que “para nadie es un misterio que Colombia se ha tenido que ajustar a una nueva realidad por la caída de la renta petrolera, la regla fiscal nos permitió ampliar el déficit fiscal, en 2016 llegó a su máximo de 4%. Este año va a ser 3,6%, menor al del año pasado, y en 2018 será 3,1% del PIB, una corrección en el déficit”.

Además, el jefe de la cartera agregó que el presupuesto para 2018 tendrá tres modificaciones que no se detallaron en las comisiones económicas, las cuales inyectaron recursos por $720.000 millones para educación, salud y vías.

El jefe de la cartera explicó que educación, específicamente las universidades públicas, tendrán $100.000 millones más en recursos; en salud, para el tema de hospitales, habrá $500.000 millones más; y las vías para el Bicentenario tendrán una asignación adicional de $120.000 millones.

En el caso de este último renglón, el jefe de la cartera explicó que en el bicentenario de independencia, el departamento de Boyacá ha solicitado un plan para construir una infraestructura de transporte y de patrimonio histórico, lo que “permitirá hacer inversiones que el país está en mora de hacer”, destacó Cárdenas.

Esto fue aprobado por los ponentes del proyecto de presupuesto antes de entrar a las discusiones en el Congreso de la República.

Sin embargo, el debate en el Capitolio estuvo centrado en que este es un presupuesto que refleja un aumento ineficiente del gasto y una caída en la inversión.

Ernesto Macías, senador del Centro Democrático, afirmó que “en el proyecto del presupuesto de 2018 lo que hemos venido denunciando es el derroche del Gobierno Nacional”. Además, el senador agregó que “no entiendo para qué fue la Reforma Tributaria, si se iba a aumentar el gasto (...) lo que uno ve en el presupuesto es más deuda, más gasto y menos inversión”.

Juan Carlos Rivera, representante a la Cámara de Representantes de la Comisión Cuarta, comentó que “la reducción en el presupuesto se debe a la disminución de los ingresos petroleros que registraron un déficit al Estado desde 2014. Este es un Presupuesto ajustado a las necesidades y se trató de distribuir los recursos de la mejor manera”.

Lo demás que se había aprobado en las Comisiones Económicas del Congreso quedó inalterado. Esto quiere decir que el sector de la educación continúa como el que tiene más recursos con $37 billones. Luego está defensa, trabajo y salud, los cuales tienen asignados montos por $31 billones, $28,9 billones y $24,6 billones, respectivamente.

En total serán 12 sectores que tendrán incrementos en el presupuesto para 2018, a diferencia de la vigencia para 2017. Mientras que 17 sectores tendrían disminuciones para 2018 hasta de 62% como es el caso de deporte y recreación o 41% en ciencia y tecnología. Vale la pena recordar que en este último sector se agregaron $117.000 millones, lo que aumenta los recursos para 2018 en esta rama por $339.000 millones.

El ministro de Hacienda comentó que “en general hay una reducción en los recursos para todos los sectores, debido a los menores ingresos que ha venido presentando el país”.

Desde la academia, Carlos Sepúlveda, decano de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario, comentó que “este es un presupuesto que no invierte en todas las necesidades que tiene Colombia, a pesar de que se hacen esfuerzos en educación y trabajo. Sin embargo, se ajusta a la realidad y el panorama que vive Colombia, con un crecimiento bajo y con una reducción por los ingresos del petróleo”.