Galón de gasolina corriente ha aumentado $4.384 desde octubre y seguirá subiendo
miércoles, 9 de agosto de 2023
Durante los últimos tres meses de 2022, los incrementos fueron de $200 por mes aproximadamente, este año ya rondan $600
Una discusión que se ha convertido en la piedra en el zapato para bajar la inflación es el incremento mensual al precio de la gasolina corriente que, de hecho, hoy impulsó a los taxistas a salir a manifestarse en contra de la medida implementada por los Ministerios de Hacienda y de Energía.
A partir de octubre del año pasado, la gasolina empezó a subir de forma progresiva en $200 en promedio. El precio del galón estaba en $9.180 en promedio en septiembre de 2022, y con los incrementos mensuales cerró el año en $9.778.
En enero el incremento fue de $400 en promedio y dejó el galón en $10.167 en promedio. Con aumentos que oscilaron entre $250 y $400 transcurrieron los meses hasta abril, pero a partir de mayo, el incremento ha sido constante de $600 en promedio, lo que puso un precio del galón de gasolina de $13.564 en agosto.
El acumulado de los incrementos, entonces, es de $4.384 en promedio desde octubre del año pasado.
La situación pone en jaque al sector de taxistas, sobre todo en un escenario en el que el ministro de Transporte, William Camargo, aseguró en vivo en La FM este miércoles que se descartó la tarifa diferencial para la gasolina.
"Lo que estamos buscando es una migración hacia vehículos limpios, para que estos tengan menores costos. Está descartada una tarifa diferencial para la gasolina". Según el jefe de la cartera, "las decisiones del pasado, que no fueron responsables, afectaron la estructura de costos, esto fue conocido por nosotros cuando estábamos en el proceso de empalme".
¿Por qué sube la gasolina?
El subsidio a los precios de los combustibles, que se gestiona a través del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepc), y que se otorgó durante el gobierno de Iván Duque, generó un hueco insostenible para las cuentas fiscales.
En su momento, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, explicó que "en 2021, a nombre de la pandemia el Gobierno congeló el precio, el déficit fue de $11,4 billones y lo pagó del Presupuesto General de la Nación, es decir, lo volvió un gasto recurrente. En 2022 fue de $36,7 billones y el Gobierno saliente pagó $10, otra vez del presupuesto".
Las cuentas del ministro señalan que en 2023 el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (Fepc) se redujo a $17,8 billones, que se tendrán que pagar en 2024, y del que $4 billones son por gasolina y el resto por diésel, que aún no se ha modificado. "Si seguimos en las condiciones, en 2024 tendremos un déficit de medio billón de diésel".
Esta decisión ha sido celebrada por analistas económicos y de energía, pues entidades como el Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf) y Corficolombiana han insistido en que es una determinación correcta, pero también se ha sugerido de forma imperativa que los precios del Acpm también deben empezar a subir, a esto último, el Ministerio de Hacienda espera tomar acción de alza de precios una vez se cierre la brecha con el precio internacional en cuanto a la gasolina corriente, que se proyecta que suceda a final de año.