Economía

El sector energético tendrá inversiones por más de US$12.000 millones a 2018

Merian Araujo

El debate por la venta de Isagen y el impacto que va a tener la salida del Gobierno de la energética es la coyuntura indicada para analizar los avances del sector, sus retos y cómo se prepara para los próximos años.

A propósito del tema, Luis Alejandro Camargo, gerente general de la Compañía de Expertos en Mercados S.A. (XM), hizo un balance sobre los ochos años que cumplen como administradores del mercado mayorista de energía de Colombia, las inversiones por más de US$12.000 millones que se prevén a 2018 y con las cuales el Gobierno espera poner el acelerador en materia de expansión.

Cuando el Gobierno anunció la venta de Isagen, dijo que este ya era un mercado maduro. ¿Es eso cierto?
En los 90 el sector era deficitario y el Estado tenía que poner plata. Hoy pone muy poco, pero en el balance general, recibe. Gracias a eso, Colombia tiene buenos indicadores, comparada con países de desarrollo equivalente: la cobertura en las ciudades es casi 100% y en el rural está arriba de 90%. Hoy el Estado ya no tiene que tutelar a través de empresas la generación y distribución. Esa ya es la misma dinámica de las empresas.

Pero, ¿no se perdería autoridad en la regulación del sector si el Gobierno sale de Isagen?
Como lo decía el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, lo que el Estado sí debe vigilar son los roles que le quedaron por ley: la regulación de tarifas en aquellos aspectos en donde el mercado no resuelve. Por ejemplo, las redes de distribución y transmisión son monopolios naturales, allí no hay competencia. Entonces, el Estado debe vigilar, a través de la Creg, cómo serán las tarifas.

Pese al crecimiento, aún hay temas por mejorar. Hay quienes dicen que nuestra energía es la más cara de la región.
Sí tenemos cosas por mejorar. Pero hay que tener en cuenta con qué países nos comparamos porque, por ejemplo, en Venezuela se dan muchos subsidios y el combustible es mucho más barato. Al contrario de esos países, Colombia tiene una confiabilidad mucho más alta, porque, por un pago que hacemos los colombianos, los generadores se comprometen a entregar energía en firme, haya o no buen clima.

¿Qué hay que mejorar? ¿Cómo ve la gestión de las empresas y el Gobierno?
En los países emergentes el sector eléctrico ha sido uno de los cuellos de botella en materia de infraestructura. Eso tiene implicaciones en costos. Y hay varias cosas que se están haciendo. Por ejemplo, en generación, hoy estamos construyendo, a riesgo, US$10.000 millones, según estimativos. Allí hay obras como Hidroituango, Hidrosogamoso y otra serie de proyectos térmicos. En transmisión, unos US$2.000 millones que aprobó recientemente el Ministerio de Minas. Esto totaliza US$12.000 millones a 2018, sin contar lo que Colombia va a seguir requiriendo en consumo.

La opinión

Ángela Montoya
Presidenta ejecutiva de Acolgen

“Al hablar de tarifas no solo se puede ver el tema del precio sino que debemos hablar por el cargo por confiabilidad, que está diseñado hace 6 años”.