En discurso ante Naciones Unidas, Petro pidió “cambiar deuda por vida y naturaleza”
miércoles, 21 de septiembre de 2022
En su primer intervención ante el pleno de la ONU, el presidente Gustavo Petro envió un duro mensaje sobre la lucha contra las drogas
Al interior del Gobierno, y cercanos al presidente Gustavo Petro, su primer discurso ante el pleno de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en el que criticó la guerra contra las drogas, el consumismo y comparó a la cocaína con el petróleo y el carbón, fue una muestra de cambio de oratoria a lo tradicional que se ve en este encuentro anual de líderes, lo cual aplauden.
Pero para la oposición, algunos tildaron el mensaje de anticuado por mencionar la postura de cambio en la guerra contra las drogas.
Precisamente este fue el punto en el que se enfocó el Jefe de Estado. Fueron poco más de 20 minutos en los que Petro se refirió al narcotráfico como un problema global, pero que no es el único.
Para él, también es un desafío el consumismo de las grandes potencias que “resaltan el capital sobre el bien del medio ambiente”.
Por eso, en lo que fue un claro mensaje a las grandes potencias del mundo, Petro hizo un llamado a cambiar la estrategia contra los cultivos ilícitos, pidió mayor protección a la Amazonía, no ser “hipócritas” sobre el cuidado a ella y los bosques, así como “cambiar deuda” por acciones más contundentes en favor de la naturaleza.
El Presidente dijo que convoca a los líderes de América Latina para repensar la fórmula contra el narcotráfico, y que los países del norte, como se refirió a las principales economías del globo, muestren mayor intención de pensar en el futuro del ambiente.
“Si no tienen la capacidad para financiar el fondo de la revitalización de las selvas, si pesa más destinar el dinero a las armas que a la vida, entonces reduzcan la deuda externa para liberar nuestros propios espacios presupuestales y con ellos realizar la tarea de salvar la humanidad y la vida en el planeta. Lo podemos hacer nosotros si ustedes no quieren”. Y tal como en su momento, lo mencionó en su discurso de posesión el 7 de agosto, cuando habló de cambiar deuda por acciones en pro de la naturaleza, le dijo a esos países del norte “solo cambien deuda por vida, por naturaleza”.
Los efectos de la droga
La última revisión de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (Ondcp, por sus siglas en inglés) sobre la política antidrogas en Colombia, reportó que el año pasado los cultivos de hoja de coca llegaron a 234.000 hectáreas, eso es una reducción de 11.000 hectáreas frente a 2020, periodo en el que se contabilizaban más de 245.000.
El país tiene la mayor extensión de tierras destinadas a la hoja de coca y por eso es uno de los principales colocadores de cocaína en el mercado clandestino internacional. El año pasado se reportó una leve caída, un punto que el expresidente Iván Duque resaltó antes de terminar su mandato porque los cultivos de hoja de coca venían creciendo desde 2018, y más aún porque la producción de cocaína pasó en 2020 de 1.010 toneladas a 972 al cierre del año pasado.
Desde 2020, la misma Ondcp reporta que la política antidrogas de Colombia se ha basado en la estrategia militar, la aspersión por glifosato, y la erradicación manual, “que es una de las más difíciles porque equivale a entrar a la boca del lobo, y ha dejado cientos de víctimas por los enfrentamientos”, agregó Sergio Ozuna, analista del Observatorio Ambiental y Social de la Universidad de Brown.
Pero para el presidente Petro, “la guerra contra las drogas ha fracasado. La lucha contra la crisis climática ha fracasado. Han aumentado los consumos mortales, de drogas suaves han pasado a las más duras, se ha producido un genocidio en mi continente y en mi país, han condenado a las cárceles a millones de personas, para ocultar sus propias culpas sociales le han echado la culpa a la selva y sus plantas. Han llenado de sin razón los discursos y las políticas”.
Por eso el Jefe de Gobierno, precisando su mensaje a las principales economías del mundo, dijo que “yo les demando desde aquí, desde mi Latinoamérica herida, acabar con la irracional guerra contra las drogas”.
Efectos del narcotráfico
El año pasado la Universidad Carnegie Mellon reportó en una investigación sobre economía ilegal, que el narcotráfico estaba generando movimientos por más de US$30.000 millones en negocios ilegales para América Latina, incluso el peso es tal que se habla de un efecto en la variación de la tasa de cambio en algunos periodos del año para países de la región “pues está generando una salida de capital que afecta el consumo interno, pero especialmente la salud pública dejando hasta más de 5.000 adictos que luego pueden llegar ala muerte por sobredosis y experimentación a otras drogas”.
Así que el presidente Petro, también dedicó parte de su discurso a esos efectos que también pueden sentir los estadounidenses.
“40 años ha durado la guerra contra las drogas, si no corregimos el rumbo y esta se prolonga otros 40 años, EE.UU. verá morir de sobredosis a 2,8 millones de jóvenes por fentanilo, que no se produce en nuestra América Latina. Verá millones de afros norteamericanos ser apresados en sus cárceles privadas. Verán morir el sueño de la democracia tanto en mi América como en la América anglosajona. La democracia morirá allí en donde nació, en la gran Atenas occidental europea”.
El reporte de control de drogas y sustancias ilegales de la U. California, que citó el entonces presidente Donald Trump, cuantificó en US$5.000 millones los esfuerzos militares para América Latina con respaldo de las finanzas estadounidenses, aprobados por su propio Congreso, para hacer frente al narcotráfico. La cifra resalta mientras el presidente Petro durante su discurso agregó que “la guerra contra las drogas ha fracasado. La lucha contra la crisis climática ha fracasado”, haciendo referencia a que el modelo debe cambiar.
Crítica al sistema general
Para Petro, las grandes potencias del norte del planeta están bajo programas que carecen de un verdadero efecto en la conservación ambiental. “Nada más hipócrita que el discurso para salvar la selva”.
Incluso el discurso es una clara analogía a su posición frente al uso de los hidrocarburos, precisamente la crítica que llegó desde algunos sectores en Colombia fue al comparar ramas de la economía como el petróleo con el problema de las drogas. “¿Qué es más venenoso para la humanidad, la cocaína, el carbón o el petróleo?”, fue uno de los momentos en los que se sintió un silencio en el pleno de la ONU, pues luego de esto Petro reforzó el mensaje señalando que “el dictamen del poder ha ordenado que la cocaína es el veneno y debe ser perseguida, así ella solo cause mínimas muertes por sobredosis, y más por las mezclas que provoca su clandestinidad dictaminada, pero, en cambio, el carbón y el petróleo deben ser protegidos, así su uso pueda extinguir a toda la humanidad. Estas son las cosas del poder mundial, cosas de la injusticia, cosas de la irracionalidad, porque el poder mundial se ha vuelto irracional”.