En la búsqueda de siete viceministros que ejecuten la agenda política pública

El Gabinete del segundo periodo del presidente Juan Manuel Santos llegó con cambios, y sus viceministros, ese segundo anillo de poder no fue la excepción. A un mes del arranque, de los 32 viceministerios, todavía hay siete cargos a la espera de que sean ratificados o nombrados.

Sin duda, los ministros son las personas clave en dirigir cada una de las 16 carteras del Gobierno. Son las primeras autoridades en sus sectores y quienes coordinan la agenda de política pública. Pero detrás de ellos están unos alfiles que llevan las riendas de la ejecución. Y para esto se necesita personas técnicas, con conocimiento especializado. “Incluso se espera que tengan una mejor hoja de vida que un ministro, porque es quien ejecuta la política pública”, dice Germán Sahid, profesor de la Universidad del Rosario.

Actualmente, hay 32 cargos de viceministros, de los cuales 19 fueron ratificados, seis son nuevos, dos están vacantes y cinco son los funcionarios que venían del gobierno anterior y que aún no se ha tomado la decisión de ratificarlos o no.

El presidente Juan Manuel Santos es quien los designa. Las carteras en las que no se han definido los funcionarios son el Ministerio de Comercio, con la viceministra de Desarrollo Empresarial, María del Mar Palau; y la de Turismo, Sandra Howard. Mariana Sarasti ya fue designada como viceministra de Comercio Exterior y el decreto de la designación, el 1705 del 8 de septiembre, ya se puede ver en la web de Presidencia.

Tampoco se han hecho pronunciamientos sobre el viceministerio de Asuntos Agropecuarios, liderado por ahora por Hernán Román; de Infraestructura, por Carlos Alberto García, ni del Ministerio del Interior, con Juan Camilo Restrepo a cargo del viceministerio de Relaciones Políticas.

Las dos vacantes están en el Ministerio de Transporte, en el que García ha ejercido los dos viceministerios por más de un mes y la segunda es del viceministerio de Educación Superior, porque Patricia Martínez se devuelve a trabajar en Cartagena.

Los confirmados están en el Ministerio de Defensa, Hacienda, Relaciones Exteriores, Comercio, Cultura, Ambiente, Vivienda, Salud, Educación y Minas. La mayoría de ellos los jefes de cartera han hecho anuncios de que permanecerán en el cargo.

El ADN viceministerial de los ya anunciados o ratificados muestra que la mayoría son abogados (10), seguido de economistas (5). Por ser cargos técnicos, se esperaría que su profesión fuera especialista del sector. “Si es salud se espera un gran médico. Si el ministro y el viceministro son políticos netos, ¿dónde queda el criterio especializado del sector?”, afirma el historiador Armando Martínez.

Para Sahid es esperable que los funcionarios tengan estos pregrados. Abogados por la parte del manejo político que tampoco es ajeno a ellos y economistas por la parte de la ejecución presupuestal. Sin embargo, en su opinión, muchas veces eso no coincide con la eficiencia.

En efecto, una de las preocupaciones ha sido la ejecución presupuestal. Cuando se ve frenada el presidente Santos ha recurrido no solo a remezones ministeriales, sino también a relevos de los vices.

Por ejemplo, en los dos primeros meses del año pasado, de los 10 cambios, seis se habían hecho en esos cargos. Se espera que en los próximos días se continúe con las ratificaciones.

La ejecución del presupuesto va a medias
La ejecución será unas de las tareas clave de los viceministros. Según el último informe del Ministerio de Hacienda, a julio de este año, el presupuesto sin la deuda iba en una ejecución de 46,1%, es decir, $74,1 billones. Contando la deuda, es decir un total de $203,1 billones, ese promedio iba en 48,1%. El total de compromisos de inversión ascendió a $32,5 billones, 69,3% de la apropiación vigente por este concepto ($46,9 billones). En cuanto a las obligaciones, éstas sumaron $19,3 billones, el 41,3% de la apropiación total y el 59,6% de los compromisos adquiridos, de acuerdo con el reporte.

La opinión

Aníbal Fernández de Soto
Viceministerio de Desarrollo Rural
“El viceministro debería tener un nivel de conocimientos técnicos, funcionamiento del Estado y de política”.