Encadenamientos productivos, el trampolín para llegar a Asia

Es así como la II Macrorrueda de Negocios de la Alianza del Pacífico constituye una oportunidad de negocios y de generar mayores encadenamientos entre los empresarios de Colombia, Chile, México y Perú. 

La vicepresidenta de planeación de Proexport Colombia, María Cecilia Obando, señaló que “con cada uno de los países estamos buscando encadenamientos distintos porque tenemos necesidades y avances diferentes”, y destacó que hasta el momento se han identificado 53 encadenamientos con países de la Alianza que van a beneficiar a 250 exportadores en la primera fase. 

En el caso de Perú se han identificado cerca de nueve posibilidades de encadenamientos en glicerol para obtener colorantes; cordeles, cuerdas de polietileno y polipropileno colombianas para confecciones de punto; y envases de plástico para empacar espárragos y productos de la pesca peruana. 

Así mismo, se identificaron nueve casos con Chile en sectores como piñas frescas y secas, preparaciones alimenticias para compotas, jaleas y mermeladas; envases de vidrio, mezclas para cosméticos, insumos para fabricar papel y cartón multicapas y envases de plástico. 

Hugo Corales, director de ProChile en Colombia, considera que los encadenamientos productivos son una “oportunidad interesante” para los países de la Alianza del Pacífico pues permiten “aumentar la oferta, hacerla más atractiva y complementaria,y así podríamos alcanzar mercados mucho más interesantes”. 

Para el ejecutivo hay aspectos que permiten fomentar los encadenamientos: “tiene que haber un reconocimiento de la oferta, una oportunidad de mercado, una confianza entre los países y un marco que es el que fija la Alianza del Pacífico”, dijo. 

Todos estos encadenamientos, en donde Colombia entrega la materia prima y los países del bloque los procesan, permitirán llegar con los productos finales a países como Japón, China, Nueva Zelanda, Australia, entre otros, y así avanzar en uno de los objetivos más importante de la Alianza del Pacífco.