Estos son los desafíos que tendrán los cuatro nuevos ministros del Gobierno Nacional

El tercer remezón ministerial ya está en curso, pero a diferencia de otras oportunidades, en esta ocasión no está antecedido de una declaración oficial o la llamada a una nueva rueda de prensa. Esta vez lo preceden mensajes en la cuenta de X.

El presidente Gustavo Petro optó por esta estrategia para comenzar a remover su gabinete ministerial, como lo había anunciado hace casi tres semanas desde Suecia. En esta ocasión, según mencionó, se trataría de darle mayor celeridad al plan de desarrollo y reformar las dependencias que no estaban teniendo un buen papel en la ejecución del Presupuesto General para este año.

Sobre el papel, hasta el momento van cuatro cambios y dos señalan continuidad de visiones y proyectos, de acuerdo con los analistas políticos.

El primer anuncio y también el más reciente involucra al Ministerio del Interior. El pasado sábado el presidente Gustavo Petro anunciaba la salida de Luis Fernando Velasco al frente de esta cartera y este miércoles confirmó que Juan Fernando Cristo asumirá esta dirección por segunda vez en su vida profesional, tras haberlo realizado en el anterior gobierno de Juan Manuel Santos, entre 2014 y 2017.

Según explicó Petro en su cuenta de X, Cristo tendrá “las funciones de adelantar las reformas sociales en el Congreso, articular el cumplimiento del acuerdo de paz firmado y además hacer los puentes sociales y políticos para el acuerdo nacional que promueva los cambios normativos y use el poder constituyente”.

En esto coinciden analistas. Para ello, esta nueva legislatura será clave el papel que pueda desarrollar Cristo para la luz verde definitiva a varios proyectos legislativos, como la reforma pensional, así como la propuesta laboral que busca impulsar el mandatario nacional.

“El Ministerio del Interior es clave. Sabemos que Petro no tiene mayorías en el Congreso y ahí es cuando Interior entra al ruedo, en medio de lo que ellos llaman el segundo tiempo, donde también está el último año, que es más electoral. Debe mantener viva la agenda legislativa”, argumentó Mauricio Jaramillo Jassir, analista político.

Las reformas, eje central

Tal como lo anunció en sus mensajes de X, el Presidente ya asignó cuáles son los retos que tienen por delante las nuevas jefas de la cartera y dos de ellas están relacionadas con el proceso de las reformas sociales, la propuesta de justicia y la relacionada con la entrega de tierras productivas al campesinado.

A Martha Carvajalino, otrora viceministra de Agricultura y hoy designada al frente de la cartera, le tocó el reto de “impulsar la reforma agraria” y “un campo productivo con justicia social”. Horas después, la misma funcionaria agregó que también “va a promover el reconocimiento de los pueblos indígenas, las comunidades negras y el campesinado”.

Según puntualizó Jaramillo, en estos dos nombramientos se busca la continuidad de las ideas y, aunque no es algo tácito en cuanto a la nueva ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, también va por ese mismo sentido.

Vale la pena reiterar que los nuevos nombramientos en Agricultura y Transporte ya hacían parte de las filas del Gobierno Nacional en el pasado.

“Buitrago lo primero que hace es reunirse con la comisión de expertos para la reforma a la justicia, su primera tarea. Mantener ese ritmo no es fácil, y este es un presidente que quiere cambios inmediatos, porque además el tiempo es cada vez más corto, no son iguales los primeros dos años, donde todavía está la expectativa, que estos dos últimos en los que seguramente se va a sentir mayor desgaste”, puntualizó Jaramillo.

Las cuatro claves para la próxima legislatura

En sus primeras declaraciones tras ser designado como ministro del Interior, Juan Fernando Cristo aseguró que desde su cartera se priorizarán cuatro puntos claves. El primero es la búsqueda de un acuerdo nacional para evaluar hacia el futuro una Asamblea Nacional Constituyente bajo los parámetros de la Constitución de 1991.

Un segundo objetivo es la implementación del acuerdo de paz con las Farc y, como tercer punto, profundizar la autonomía regional. Una cuarta clave consiste en priorizar la discusión de las reformas a la educación, a la salud y la propuesta laboral.