Cambiar la regla fiscal como pidió Petro golpearía al crédito y la llegada de inversión
viernes, 17 de noviembre de 2023
Expertos cuestionan que el presidente Gustavo Petro proponga más inversión pública a través de la flexibilización de la norma
En un escenario de contracción del Producto Interno Bruto, con recursos significativos por ejecutar aún, el Gobierno encuentra en la regla fiscal un obstáculo para la inversión pública, que aportaría a reactivar la economía.
“Tal como está diseñada la regla fiscal, se está dando prioridad al pago de la deuda pública y no a la inversión. Pagar deuda pública no reactiva la economía, la inversión sí”, reiteró ayer el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, en el mismo sentido que el presidente Gustavo Petro, quien abrió el debate sobre la conveniencia de mantener la norma de control al endeudamiento del Gobierno, después de que el Dane reveló que el PIB cayó 0,3% en el tercer trimestre del año, algo que no ocurría desde 2020, bajo el impacto de la pandemia.
Diversos analistas económicos consultados por LR, junto con los exministros de Hacienda, José Manuel Restrepo y José Antonio Ocampo, explicaron las consecuencias que traería modificar, suspender o incumplir la regla fiscal como mecanismo para disponer de más recursos para inversión. La desconfianza en el manejo de la economía, el encarecimiento de la financiación al Gobierno y un impacto en la inversión son las principales coincidencias.
“Modificar la regla fiscal envía más mensajes de incertidumbre y desconfianza, y por ello deteriora aún más la inversión privada y cierra el espacio fiscal a la inversión por el sobre costo del financiamiento”, anotó el exministro Restrepo. “Se comete un error conceptual al decir que por pagar intereses de deuda hay menos espacio para la inversión. Los intereses de deuda entran en el déficit total, pero no en la meta de la regla fiscal, que es sobre el resultado primario”, agregó.
“No veo posible en el corto plazo que se modifique o se suspenda la regla fiscal, porque mientras no se modifique la ley, hay que cumplirla”, advirtió el director de Estudios Económicos del Grupo Bolívar, Andrés Langebaek.
“Sobre un escenario que facilite el gasto, este año en particular, los recursos de inversión del Gobierno a octubre tienen una ejecución de 57%. No es un problema de falta de recursos, porque la ejecución es muy baja. Y algo más que se observa es que el crecimiento de la inversión del Gobierno Nacional Central entre 2022 y 2024 es de 40% en términos reales. La pregunta es si no es suficiente con un crecimiento de esa naturaleza”, señaló.
En el mismo sentido, el director de Investigaciones de Corficolombiana, José Ignacio López, dijo que “es preferible que el Gobierno, que todavía tiene un presupuesto holgado, acelere la ejecución de los proyectos que tiene y busque articular mejor las iniciativas público-privadas, para que la inversión vuelva a una senda de crecimiento”.
Marc Hofstetter, profesor de macroeconomía de la Universidad de los Andes, señaló que es poco probable que una iniciativa para modificar la regla fiscal prospere en el Congreso. “El Gobierno podría, simplemente incumplirla. Al final, no es que se vaya a la cárcel el ministro de Hacienda si no cumple. Pero los mercados financieros verían con muy malos ojos una acción de ese estilo y eso tendría implicaciones sobre los costos de financiamiento al Gobierno, que ya están en niveles muy altos”, explicó.
Es esencial controlar el endeudamiento
José Antonio Ocampo, exministro de Hacienda y exdirector de Planeación Nacional, señaló a través de su cuenta de la red social X que “la regla fiscal es esencial para el país, teniendo cuenta en particular los altos niveles de endeudamiento del Gobierno”.
Agregó que la norma “tiene, además, elementos contracíclicos, y el fuerte crecimiento de los ingresos tributarios da un margen importante para aumentar la inversión pública y contribuir a la reactivación de la economía. El anuncio de su modificación es negativo: genera desconfianza en el manejo económico del país. Ha sido desafortunado”.