“Considero que la reforma tributaria del Gobierno Nacional estuvo mal concebida”
viernes, 31 de mayo de 2024
El exministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, entregó un balance sobre el actual estado de la economía nacional y qué planes haría
El panorama macroeconómico del país no es el mejor. Luego de la desaceleración económica marcada en 2023, con un crecimiento de apenas 0,6%, el Gobierno Nacional prometió que este año sería el de la reactivación.
Sin embargo, la economía nacional solo repuntó 0,7% en el primer trimestre de 2024, el cual fue el peor arranque de año desde la crisis de la pandemia.
En medio de este contexto, donde también se presenta un bajo recaudo financiero producto de esta dinámica, Alberto Carrasquilla, exministro de Hacienda, participó en un Inside LR en el que entregó su visión sobre la economía nacional y dio pinceladas sobre las soluciones que podría hallar el Gobierno para “enderezarla”.
¿Cuáles son los sectores claves para lograr la reactivación?
Sin duda los datos del primer trimestre estuvieron muy por debajo de lo que se anticipaba y de obviamente de lo deseable. Es difícil poner el dedo en un sector específico. El problema es mucho más grande y es un problema de desconfianza que ha llevado a una caída muy grande de la inversión, eso no solo afecta el dato puntual del trimestre, sino, mucho más preocupante, afecta las capacidades de la economía de crecer en el futuro. La noticia de ese primer trimestre es muy triste.
¿Cómo explica esa caída de la inversión en Colombia?
Fundamentalmente por caída de la confianza. Llevamos un largo periodo de cifras negativas y muy constantes. El ambiente es ‘no estamos desesperados, pero no estamos optimistas y vamos a retrasar inversiones’.
¿La necesidad política afectaría la reactivación económica?
Eso como telón de fondo de la discusión macroeconómica del país no es un bueno. El telón de fondo debería ser cómo hacemos para recuperar el empleo, cómo hacemos para mejorar el sistema educativo, cómo hacemos para mejorar el sistema de salud. Esas deberían ser las discusiones. Esto del proceso constituyente es una gran distracción.
¿Por qué se están cayendo tantas normas de la Tributaria?
Yo creo que estuvo mal concebida esa reforma. La discusión tributaria en Colombia debería ser una discusión de cómo nos empezamos a parecer más a los países pares nuestros en materia de niveles de ingreso. Hay unas falencias gravísimas en nuestro sistema tributario, algunas de las cuales, en grado muy limitado, se atendieron en la en la reforma.
En particular, nuestra tributación empresarial es una proporción demasiado grande de la tributación total en materia de renta y, en materia de IVA, tenemos una asimetría gigantesca con el resto del mundo.
¿Esas medidas son las que están afectado la inversión?
Yo creo que en parte sí, la tasa de tributación empresarial no es atractiva para mucha gente. También es muy importante aislar los efectos sobre la rentabilidad de que tienen las tasas de tributación altas respecto del problema más de fondo es el tema de la confianza.
¿La carga que hay justifica ampliar el cupo de la deuda?
Esos cupos de endeudamiento son lógicos. En un contexto estructuralmente deficitario, hay que ampliar el cupón de deuda; no habría cómo financiar el presupuesto nacional.
¿Puede existir la posibilidad de cesación de pagos?
Aritméticamente es perfectamente posible. Los vencimientos de la deuda en un contexto en el cual somos deficitarios no va a salir de los impuestos. Las amortizaciones y los intereses que son bastante onerosos, sobre todo las amortizaciones, tiene que venir de emitir un nuevo endeudamiento.
¿Cuáles son los cisnes negros y blancos que usted ve?
El cisne negro es el que todos debemos tener en cuenta y es que, súbitamente y sin mucha razón de ser, se cierren los mercados de capital. Eso nos ha pasado en Colombia en 1984 y desde 1997 a 1999 y fue violento para la economía.
Tuvimos que hacer unos ajustes de gasto monumentales. Como el sector público no es tan ágil en hacer esos ajustes para adecuarse a la nueva realidad del financiamiento, le tocó al sector privado.
Prácticamente todo el ajuste de la cuenta corriente de la balanza de pagos, que es un indicador de cuánta plata nos están prestando, implicó un ajuste del sector privado como de 10 puntos del PIB.
¿Y el cisne blanco?
Esto es algo que ya está ocurriendo y que debe ser despejado. Son todas las dudas con las que comenzamos la charla. Las dudas del sector empresarial, las dudas sobre la sostenibilidad fiscal. Eso es algo que nos permea, pero puede ser un cisne blanco que nos lleve a una continuidad de un bajo crecimiento, y que también se nos eleva el desempleo.
¿Qué espacios se tienen para cumplir la regla fiscal?
Hay que tener el beneficio de la duda y esperar el marco fiscal de mediano plazo para poder contestar adecuadamente esa pregunta. La caída del recaudo, usted la menciona, muy preocupante.
Hay discusiones sobre si es apropiado o no es apropiado considerar unos recursos de una sola vez como ingresos permanentes y por lo tanto, ¿cuál es el lugar de esos recursos de una sola vez dentro del cumplimiento de la regla fiscal?
Todas esas discusiones son importantes. Yo, si fuera el ministro, estaría 24 horas, siete días a la semana preparando el marco fiscal de mediano plazo para despejar todas estas dudas de una manera adecuada y seria.
¿Si fuera ministro se concentraría en buen marco fiscal?
Me concentraría en escribir un excelente marco fiscal de mediano plazo que despeje dudas sobre el cumplimiento de la regla fiscal que explicara, si prevemos que se va a violentar, ¿cómo vamos a volver entonces a la senda?
El perfil
Alberto Carrasquilla es economista de la Universidad de los Andes con estudios de posgrado como doctor en Economía de la Universidad de Illinois. Fue el ministro de Hacienda en dos periodos presidenciales, el de Álvaro Uribe Vélez y con Iván Duque Márquez.
También se ha desempeñado como presidente del Comité Ministerial para el desarrollo; presidente del directorio de la Asamblea de Gobernadores de la CAF.
Además, estuvo en la Junta Directiva del Banco de la República; y se desempeñó como economista líder de investigación en el BID y gerente técnico del Emisor. Fue profesor y decano de Economía en la UniAndes.