Hasta noviembre, la aprehensión de gasolina de contrabando disminuyó 10%

En lo corrido de 2018, la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) ha aprehendido 718.944 galones de combustible de contrabando, cantidad avaluada en $5.204,52 millones. Si bien la cantidad de galones es 10% inferior a la aprehendida en el mismo periodo del año pasado (800.429 galones), el avalúo de este año es 2% superior ($5.120,86 millones).

Dado que el contrabando de combustible es una actividad ilícita, es muy difícil determinar su efecto en la economía colombiana, pero las autoridades estiman que impacta entre 10% y 15% de las ventas nacionales y que el país deja de recibir alrededor de US$370 millones en regalías.

Jairo Gómez Fontalvo, presidente de Fendipetróleo, señaló que las áreas en las que la distribución de combustible se ven más afectada por el contrabando son La Guajira y Norte de Santander. En Nariño también hay impacto, pero es menor. “El precio interno de la gasolina en Venezuela es mínimo, casi gratis, por lo que es tan lucrativo venir a venderla en Colombia. En la frontera con Ecuador también hay contrabando pero con menor intensidad, por el subsidio del precio de frontera”, señaló.

Efectivamente, según información suministrada por la Polfa, la zona en la que más se han aprehendido galones de combustible es en Riohacha, con 317.614 galones, 10% menos que lo aprehendido en los mismos 11 meses del año pasado.

Además, estos bienes producto de contrabando no se quedan únicamente en las zonas de frontera, sino que las autoridades han identificado que se comercializan en la región Caribe y hasta han llegado a distribuirlo en el interior del país.

En este sentido, vale la pena mencionar que una de las ciudades en las que este año aumentó el número de aprehensiones fue Cartagena, en la que los galones decomisados por la policía creció 1,596% frente a 2017.

Para ponerle fin a este problema, desde este año, las autoridades han venido trabajando en un nuevo modelo, que se basa en cinco enfoques: lucha frontal contra la corrupción, desarticulación de las estructuras criminales, cooperación público - privada, cultura de la legalidad, pues en las zonas donde hay contrabando no se ve esta actividad como ilegal, y la intervención operativa.

“Hemos adoptado medidas de control integrales, con el fin de acabar con la ilegalidad de hidrocarburos procedente del vecino país. El incremento representativo en el consumo de combustible legal en el país es una cifra histórica en los últimos 10 años”, destacó Juan Carlos Buitrago, director de la Polfa.