Índice de Confianza del Consumidor avanzó ligeramente en marzo y se ubicó en 35,3

El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) llegó a 35,3 puntos para el mes de marzo, según lo revelado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane). Esto representa un avance de 0,4 puntos porcentuales si se compara con el indicador de 34,9 puntos presentado en febrero.

Juan Daniel Oviedo, director del Dane, aseguró que las lecturas de los datos de los tres primeros meses en conjunto demuestran un retroceso trimestral si se compara con el mismo periodo del año anterior.

“Es importante establecer que las lecturas de enero, febrero y marzo son estructuralmente inferiores a las del trimestre inmediatamente anterior. A pesar de que vemos una ligera recuperación de 0,4 puntos porcentuales del ICC, hay un retroceso estructural del último trimestre, en comparación con la evolución histórica”, dijo Oviedo.

El director del Dane destacó que ha habido un pesimismo más marcado en los primeros tres meses del año relacionados con las perspectivas económicas tanto del hogar como de la economía a nivel general.

Según Raúl Ávila, docente de la Universidad Nacional, la inflación (que para el mes de marzo alcanzó 8,53%) es uno de los factores que más preocupación genera por el encarecimiento de los precios de los alimentos. “Esto hace que la gente sea más conservadora al momento de pensar en procesos de inversión y gastos de compras de consumo”, dijo.

Oviedo destacó que la confianza del consumidor alcanzó un máximo en octubre de 2021 (40,2 puntos), el cual el país no ha vuelto a reportar. “Todos estábamos expectantes ante el levantamiento de las restricciones del aforo para la prestación de servicios y la dinamización del turismo”, aseguró.

Pese a este optimismo a final del año pasado, el Dane reporta que los jefes de hogar bajan cada mes las estimaciones de un buen comportamiento de la economía de los hogares durante los próximos 12 meses.

Ávila destacó que hay otros factores que han reducido la confianza dentro de los hogares. Las elecciones, por ejemplo, son escenarios políticos que inciden en la economía y se suman a otros factores como la inflación. “Hay que tener en cuenta el reflejo de lo que sucede con las elecciones. Las primeras que se dieron en marzo para el Congreso y las comicios para los filtros de las precandidaturas presidenciales pueden elevar la incertidumbre porque no se sabe qué puede pasar”, aseguró el experto. Las propuestas y declaraciones de los aspirantes a la Casa de Nariño afectan también la percepción del mejoramiento de la economía.

Además, el alto precio del dólar y la coyuntura mundial marcada por el conflicto entre Rusia y Ucrania ha sido un detonante para menoscabar la confianza dentro de los hogares. “Las noticias sobre el encarecimiento de algunos bienes y productos que se conseguían fácilmente y que están escaseando, sumado a la falta de insumos, pueden ser causas también para la pérdida de confianza”, dijo Ávila.

El director del Dane destacó también que las mujeres jefes de hogar tienen un indicador de confianza que está por debajo del promedio de los jefes de hogar hombres . En ese sentido, 44,7% de las mujeres encuestadas asegura que la economía al interior del hogar está peor, mientras que 43,3% de los hombres creen que ha desmejorado con el tiempo.

Sobre esto, Ávila asegura que la contratación laboral de las mujeres se vio disminuida por la pandemia, pues las actividades de educación y servicios, afectadas por la llegada del covid, son ejercidas principalmente por mujeres.