Economía

Induarroz se defendió sobre impacto del precio del arroz en los consumidores

Ximena Ramírez

Con total rechazo recibió la Cámara Induarroz de la Andi, las afirmaciones entregadas por Fedearroz respecto a que las importaciones del primer contingente del alimento proveniente de Estados Unidos en el marco del TLC no han impactado el precio del grano al consumidor.

A través de un comunicado, la entidad aseguró que tanto el Ministerio de Agricultura  como los productores, tienen conocimiento de que dicho contingente terminó de ingresar al país, la última semana de diciembre de 2012, con un precio superior al señalado por el ministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo ($970) y buena parte del mismo ni siquiera ha llegado aún a los molinos. 

 Advirtió también que la administración de dicho contingente que correspondió a 79.000 toneladas (que no llegan a equivaler al 4% de la producción colombiana) llegó al país, luego de ser asignado a través de un mecanismo de subasta, que distorsionó el precio de importación del arroz hacia el alza. Cerca del 100% de la cosecha, que terminó a comienzos de noviembre, se compró a un precio promedio del 40% más de lo que se compró la cosecha grande del segundo semestre de 2011. 

 “En realidad lo que hay detrás de todo esto es una intención de Fedearroz de desviar la atención de las autoridades para esgrimir argumentos, muy poco técnicos y lejanos de la verdad, para evitar que el Ministerio de Agricultura cumpla con los anuncios que hizo en octubre del año anterior, según los cuales, autorizaría el ingreso de 90.000 toneladas provenientes de la CAN, sumadas a las 82.000 toneladas que ingresarán provenientes de Estados Unidos, de nuevo, subastadas”, sostuvo Jeffrey Fajardo, director de Induarroz.

 El directivo celebró que  el Ministerio de Agricultura y Fedearroz, hayan reconocido que en Colombia se paga el arroz más caro de la región, "condición que solo se corregirá cuando los precios de Colombia se nivelen con los de nuestros vecinos, Ecuador y Perú, para lo cual la legalización de las importaciones provenientes de estos dos países se hace cada vez más obvia y urgente, mientras se termina de agotar los inventarios de la cosecha recientemente pagada y todavía en las bodegas del país arrocero", sostuvo Fajardo.

 Agregó que en este sentido, las industrias arroceras siguen s a la espera de la formulación de una política arrocera integral, que evite este tipo de confrontaciones de intereses, que genere reglas claras de juego para todos los eslabones de la cadena arrocera y que logre realmente impactar los altos precios del arroz que hoy consumimos todos los colombianos.