ISA explora cómo entrar al negocios de concesiones viales en Colombia

Bernardo Vargas Gibsone, presidente de ISA, precisó que frente a las oportunidades que esa actividad está generando en el país, la multilatina está analizando su eventual participación.

“El anhelo de ISA es que su ecuación de riesgo contra rentabilidad sea positiva, en ese contexto analizamos que para el desarrollo de concesiones viales existen niveles de ingeniería constructiva muy elaborados y necesitaríamos un socio”, declaró.

En ese sentido, Vargas agregó que “estamos abiertos a sentarnos con socios para explorar caminos futuros en este tema. Lo mas cercano sería adquirir concesiones que existan y sean rentables, y allí también estamos abiertos a explorar alternativas”.

Consciente de que el Grupo ISA no es un constructor de carreteras, el empresario enfatizó que “si hay alternativas de proyectos con riesgo manejable y una rentabilidad buena, estaríamos pensando en licitar, y lo haríamos con socios que tengan trayectoria constructiva”. Agregó que si hay concesiones viales a la venta, ISA estaría dispuesta a explorar esa oportunidad, al igual que lo hace en otros países.

Interconexión con Panamá

En cuanto a la pospuesta por años interconexión eléctrica entre Panamá y Colombia, Vargas manifestó que se está realizando un trabajo conjunto con el gobierno de Panamá para resolver obstáculos. Uno de ellos han sido las dificultades para obtener las autorizaciones ambientales y los desafíos planteados por las comunidades indígenas.

“Esta interconexión tiene un interés que excede a Colombia y Panamá, pues hay un interés regional, discutido en el seno de varias instancias internacionales, incluido el Departamento de Estado de Estados Unidos”, puntualizó.

Decisiones en firme en Brasil

ISA espera que las autoridades brasileñas definan la indemnización que recibirá su filial Compañía de Transmisión de Energía Eléctrica Paulista (Cteep), por renovar anticipadamente la concesión que opera en ese país. Por el momento la cifra sería de 3.896 millones de reales (unos 3,3 billones de pesos, a hoy), empezaría a pagarse en 2017 y durante ocho años. Se espera que el regulador energético (Aneel), discuta consideraciones de una propuesta hecha en 2015 para que activos de transmisión de bajo voltaje sean transferidos a las empresas distribuidoras.