Ocampo, el ministro que llega a la Cartera de Hacienda de Gustavo Petro

José Antonio Ocampo será el ministro de Hacienda durante el gobierno del presidente electo Gustavo Petro, por al menos 18 meses, tiempo que dura la licencia que entregó la Universidad de Columbia, donde se desempeña como profesor desde hace dos años. El economista aceptó la propuesta del nuevo mandatario para tomar las riendas del país en materia de Hacienda. Acá, Ocampo tendrá grandes desafíos, sobre todo luego del anuncio de Petro sobre una reforma tributaria de más de $50 billones, apuesta que incluso subió a $75 billones.

Cabe recordar que Ocampo fue, durante la anterior campaña presidencial, jefe de debate económico de la campaña del candidato, Sergio Fajardo.

Ocampo es economista con grado de Ph. D. de la Universidad de Yale. Actualmente es uno de los profesionales colombianos en economía más reconocidos en el exterior, siendo coautor de libros con el premio Nobel Joseph Stiglitz. Ha tenido una larga trayectoria en el sector público: lideró el Ministerio de Hacienda bajo el mandato de Ernesto Samper, fue codirector del Banco de la República, Director del Departamento Nacional de Planeación y Ministro de Agricultura.

El caleño de 69 años, que ha explicado que como ministro se enfocará en la recuperación del empleo con programas de gasto público orientados, realizó sus estudios de economía y sociología en la Universidad de Notre Dame, en Estados Unidos, y obtuvo su doctorado en economía de Yale en 1976.

Ocampo también fue Secretario Ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, por cinco años desde 1998, y su rol académico nunca ha estado alejado de sus intereses. En este campo se destaca la dirección de Fedesarrollo, fue profesor de Economía de la Universidad de los Andes, de la Universidad Nacional, y profesor visitante en Cambridge, Yale y Oxford. Sus libros y artículos se han centrado en teoría y política macroeconómica, desarrollo económico, comercio internacional e historia económica.

Uno de los cargos más relevantes, ya que al ser nombrado por Kofi Annan se convirtió en el colombiano que ha ocupado la más alta posición en la historia de la Naciones Unidas, fue cuando lideró la Secretaría General Adjunta de las Naciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales, donde dirigió el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU (DESA) y presidió el Comité Ejecutivo de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU.

Retos económicos

El nuevo mandatario ha asegurado que tratará de cubrir el déficit fiscal de Colombia con una reforma tributaria que recaudará entre $20, $50 billones y hasta $70 billones. Ocampo tendrá que enfrentar un déficit que para el cierre del año pasado llegó a 7,1% del PIB. Petro ha propuesto como primera medida eliminar la reforma de 2019 y afirma que el Estado “puede tener un déficit sostenible de 2%”.

El nuevo mandatario afirmó que no tocará el IVApara los alimentos de la canasta familiar que tienen más nutrientes. Plantea que las personas naturales deben pagar más “entre más ganan” y tomará dos vías en relación con las tierras improductivas: las gravará o impulsará la producción en grandes extensiones de tierra que son propiedad de un solo dueño. Ocampo estará al frente de estas propuestas y será el cerebro detrás para evaluar su viabilidad.

Antes de ocupar la cartera de Hacienda, el economista asumió otro reto: encabezar el empalme con José Manuel Restrepo quien lo pondrá al día sobre las finanzas del país y cuyas reuniones empezaron ayer.

La elección de Ocampo, considerada promercado, está precedida por su experiencia, pues el economista ya había estado en el Ministerio durante los años 90 bajo el mandato de Ernesto Samper Pizano. Desde inicios de 1990, la cartera ha sido ocupada por 13 ministros, lo cual arroja un promedio de 29 meses de estadía para cada funcionario.

Ocampo afirmó en agosto de 2020, en una entrevista con LR, meses luego de la llegada de la pandemia y del declive de la economía, que para un crecimiento sostenido el país debe pensar en grandes reformas económicas. Además ha abogado por un uso más “activo” del tipo de cambio y ha defendido un impuesto sobre las exportaciones de productos básicos.

“Para mí, el tema crítico es revertir la desindustrialización, que requiere una política agresiva de diversificación de exportaciones, porque lo que hemos aprendido es que la dependencia petrolera no nos dejó muy bien”, aseguró.