La alta inflación y las transferencias sociales serán claves en la reducción de pobreza
lunes, 2 de mayo de 2022
El gobierno ha destinado $2,57 billones en lo corrido del año para transferencias sociales. Con esto se han cubierto a cerca de 9,97 millones de habitantes
El presidente de la República, Iván Duque, afirmó que este año el país llegaría llegar a las cifras de pobreza monetaria que había antes de la pandemia. Esto quiere decir que el país debe llegar a un nivel mínimo de incidencia de 35,7%.
El Dane publicó el pasado martes los resultados de pobreza monetaria de 2021. En estos se reflejó que si bien el país ha avanzado en la recuperación de personas que cayeron durante 2020 en esta condición, no logró reversar el impacto visto en 2020. Si bien el año pasado 1,4 millones de personas salieron de esta condición, el rezago frente a 2019 es de 2,15 millones de habitantes.
Sin embargo, fueron las transferencias las que jugaron un papel fundamental para lograr esta reducción. Según cálculos del Dane, de no ser por los subsidios, la incidencia en pobreza hubiera sido 3,2 puntos porcentuales mayor y en pobreza extrema 2,9 puntos porcentuales por encima.
Jorge Iván González, profesor de las universidades Nacional y Externado, afirmó que el efecto de transferencias como Jóvenes en Acción, Familias en Acción, Ingreso Solidario o devolución del IVA fueron indiscutibles.
Con el anuncio del Presidente de que este año se recuperarán las cifras de prepandemia, explicó que el Ingreso Solidario tendría una serie de cambios que incluyen aumento en el valor de la transferencia y mayor cobertura.
En primer lugar, este subsidio llegará a cuatro millones de personas y tendrá un incremento de $20.000 en su transferencia bimensual, con lo que alcanzará $400.000. Además desde julio los pagos serán diferenciales, para que los hogares con más personas y con menos ingresos reciban una mayor destinación.
Esto sumado a las mejoras en términos de empleo, recuperación de la economía podrían llevar al cumplimiento de la meta propuesta por el Gobierno.
“Es altamente probable que, si las condiciones económicas se mantienen a lo largo del año, se logre obtener cifras de pobreza compatible con un escenario similar o mejor que el observado en 2019”, señala Anwar Rodríguez, vicepresidente de Anif.
Con corte al 25 de abril de este año había 9,97 millones de colombianos que recibían alguna de las transferencias sociales. Esto es un aumento frente al número que había en 2021 cuando hubo 9,4 millones de personas cubiertas en alguno de los cinco programas de Gobierno. El principal aumento se dio en el ingreso solidario, para el que se han destinado recursos por $12,8 billones.
En lo corrido del año, la Nación ha usado $2,57 billones para estos programas y es el Ingreso Solidario el que más presupuesto requiere, con $1,36 billones.
Si bien el costo el alto en las finanzas del Estado, su impacto social es muy relevante. Rodríguez señala que el efecto de mitigación en las familias más necesitadas hace necesario mantenerlos en el siguiente gobierno para que la incidencia de la pobreza no se deteriore.
Ahora bien, la inflación lanza sombras sobre los esfuerzos para recuperar las personas en condición de pobreza. Tanto González como Rodríguez coinciden en que tendrá un impacto en la dirección opuesta a los esfuerzos del Gobierno.
En marzo, el dato llegó a 8,53% en su dato anual. No obstante, la cifra de alimentos escaló hasta 25,3%, con lo que los más afectados son los hogares pobres y vulnerables. “De no controlarse esto exitosamente en los próximos meses, podría repercutir gravemente en las cifras de pobreza monetaria”, señala Rodríguez.
Por esto considera que las transferencias deben ser continuadas por su apoyo a los hogares más impactados. Sin embargo, deberá evaluarse cuál es la mejor forma de focalizar estas ayudas.
Hacia el mediano plazo, González afirma que se deben fortalecer las políticas de empleo formal ya que es la mejor forma de mejorar de forma sostenible la incidencia de la pobreza monetaria.
Sin transferencias directas, pobreza habría sido mayor durante 2021
De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), durante el segundo año de la pandemia, hubo 19,6 millones de personas en condición de pobreza. La incidencia de este flagelo es de 39,3%. Frente a esto, el Gobierno ha implementado medidas como de transferencias sociales, Ingreso Solidario y la devolución del IVA. De acuerdo con el Dane, gracias a estos la pobreza fue 4 puntos porcentuales menor. Si no se hubieran ejecutado, la incidencia de la pobreza habría sido 42,9%.