Economía

La cadena arrocera no apoya precio mínimo de compra del Gobierno

Paula Delgado

Entre hoy y mañana productores agremiados y molineros se reunirán con el ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, para presentarle una propuesta conjunta al problema del precio del arroz luego de mostrar descontento ante la imposición de unos valores mínimos de compra por parte del Gobierno Nacional.

Los arroceros de Dignidad también se opusieron al anuncio y mostrarán su inconformidad hoy en un cese de actividades nacional.

Todos los actores de la cadena coinciden en que sí es necesario aumentar la retribución de los cultivadores pero que esos recursos deben provenir del Estado a través de una compensación de la diferencia entre lo que debe ser el precio de compra y lo que puedan pagar los industriales, valores que hoy tienen una diferencia de $30.000 en promedio por tonelada.

Según Dignidad Arrocera, desde el 1 de abril los industriales no compran la cosecha que se está recolectando en el país; de hecho, algunos molinos le escribieron una carta al presidente de la Federación Nacional de Arroceros (Fedearroz), Rafael Hernández, manifestándole que no harían ninguna transacción hasta que se revierta la medida.

La resolución 177 de 2014 no obliga a los molineros a absorber la producción y debido a la alta disponibilidad de inventarios (500.000 toneladas aproximadamente) pueden autoabastecerse un tiempo.

El presidente de la Junta Directiva de la Cámara Induarroz de la Andi y CEO en Diana Corporación S.A., Andrés Murra, dice que en el peor de los casos esta decisión motivará y recrudecerá el ingreso de contrabando que se calcula acapara 30% del mercado nacional.

Reportes de Dignidad aseguran que desde 2013 los rendimientos han caído entre 20% y 35%. “Los países vecinos tienen costos más bajos, el contrabando sigue permeando las fronteras y tenemos un precio sin posibilidad de competir en mercados internacionales”, afirma el comunicado en el que los arroceros de todas las regionales del país exigen: precios de referencia que se respeten, un subsidio, revisión a los tratados de libre comercio, líneas de crédito, garantías para la compra de la cosecha y una política de alivio a las deudas por efectos de ola invernal y el cambio climático.

Roberto Botero, representante de los arroceros de Dignidad ante el Consejo Nacional del Arroz, denunció que los costos de producción son ascendentes. “En estas condiciones no puede crecer ni mucho menos competir”, manifestó.

Pérdidas podrían aumentar los precios hasta 10%
Los sobrecostos de producción no le son ajenos al consumidor final. Según el presidente de la Junta Directiva de la Cámara Induarroz de la Andi y CEO en Diana Corporación S.A., Andrés Murra, si el Gobierno les exige pagarles más a los arroceros entonces al final es el consumidor quien verá aumentos hasta de 10% por libra de arroz. El año pasado, aún con la franja de precios (tabla con valores similares a los aprobados para este periodo) fue posible evitar estos incrementos haciendo uso de un incentivo que otorgó el Gobierno a quien se acogiera libremente a la medida, explica Murra.

Las opiniones

Rafael Hernández
Presidente de Fedearroz

“Si los productores y los molinos no logramos un acuerdo entonces será el Gobierno quien quede con ese problema”.