En la plenaria de la Cámara se ha aprobado alrededor de 80% de la reforma laboral

La discusión de la reforma laboral se encuentra en su etapa final en la plenaria de la Cámara de Representantes. Casi 80% del articulado fue aprobado y la corporación reveló que la otra semana se retomarán las sesiones para avanzar en el debate.

Hasta la fecha, faltan discusiones sobre las modificaciones que pretenden hacerse sobre los contratos de aprendizaje, el contrato agropecuario, garantías de vivienda para trabajadores rurales, licencias de paternidad y la prohibición de contratos por prestación de servicio en sindicatos.

También, están pendientes algunos puntos acerca de convenios laborales para las víctimas del conflicto armado, y modificaciones al artículo 34 de la Ley 789 de 2002, en la cual se dictaron normas para el apoyo al empleo y la ampliación de la protección social.

Lo que se aprobó

En la plenaria se aprobaron artículos referentes al contrato a término indefinido y a término fijo, en este último se estipuló que será de máximo cuatro años, y que de no celebrarse un contrato escrito, se entenderá que existe una relación laboral plena.

Los contratos por labor también presentaron modificaciones, si no se cumplen con requisitos de firma de contratos, detalles de la actividad a realizar, este se convertiría en uno indefinido; además, el hecho de que sea por obra o labor no eximiría al empleador de pagar prestaciones sociales.

También, está el punto de recargo nocturno, el cual incrementa a 100% en jornadas dominicales y en festivos. El alza comenzaría a regir desde 2027, y tendrá un aumento gradual desde 2025, en este lapso se estipularía un aumento de 80%, y en 2026 el aumento sería de 90%, lo anterior representaría un incremento de 25% en 2027, ya que, en la actualidad el recarga está en 75%.

“La reforma laboral todavía no es un hecho, le faltan dos debates muy difíciles en la Comisión Séptima y la plenaria del Senado. El proyecto ha avanzado positivamente para el Gobierno, pero no necesariamente para el mercado de trabajo”, manifestó Camilo Cuervo, socio en Holland & Knight.

“El plan es un retroceso frente a la empleabilidad y flexibilidad del mercado laboral. La medida hace más costosa la normativa y no tiene un sentido técnico en su formulación e implementación. No se está pensando en las necesidades del mercado actual”, recalcó.

David Cubides, director de Investigaciones en Alianza, argumentó que la reforma no resuelve problemas estructurales, tales como los altos niveles de desempleo e informalidad. “El plan va dirigido a subsanar problemas regulatorios, pero cualquier medida debería incentivar la solución de las problemáticas en empleabilidad”, apuntó.

Para Cuervo, el mercado actual demanda la adaptación a nuevas tecnologías, alternativas en trabajo digital o por horas. “Muchas funciones van a ser remplazadas por máquinas, y el proyecto no revisa esa realidad, simplemente propende cumplir con promesas de campaña”, complementó.
El abogado expresó que la iniciativa resta flexibilidad al mercado.

También, dijo que el plan ocasionaría un mayor desempleo e informalidad. Para Cuervo, el plan va en detrimento de la capacidad del mercado para la generación de empleos.

La postura del Gobierno frente al proyecto

El Ministerio de Trabajo manifestó que la reforma pretende mejorar las condiciones laborales, y fortalecer la igualdad en salarios. En el marco del debate, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, expresó que la flexibilización laboral no puede ser sinónimo de la pérdida de derechos para los empleados.

Mientras que la representante, María Fernanda Carrascal, quien es ponente del proyecto en la plenaria de la Cámara, dijo que la iniciativa le devolverá a los trabajadores pagos “justos”, dentro de los cuales está el alza en 100% en jornadas dominicales.