La deuda bruta de la Nación decreció en 2 puntos y llegó a $727,7 billones en marzo

El ministerio de Hacienda y Crédito Público, en cabeza de José Manuel Restrepo, reveló el documento en el que se detallan cómo se comportan, mes a mes, las deudas de la Nación.

El reporte, que tiene como corte el 31 de marzo, muestra que Colombia tiene una deuda neta de $727 billones, la cual se reparte en $453 billones como deuda interna y $274 billones en deuda externa.

Esto, según el cálculo de $1.327 billones que se tiene para el PIB de 2022, representaría 55,2% de su total, cuando para febrero de este año fue de 57,2%.

Para Juan Camilo Pardo, analista económico de Corficolombiana, este ‘avance’ en términos de disminución de la deuda neta se debe a los esfuerzos que se hicieron en años anteriores para dicho fin.

“Es importante destacar que el ajuste fiscal de Colombia en 2021 tuvo resultados mejores de los proyectados previamente pero inferior al de los otros países de la región. En este sentido, el rebote económico en 2021, junto con unas bajas tasas de interés contribuyeron de manera importante a las métricas de deuda”, dijo.

Al igual que Pardo, para Carolina Monzón, gerente de investigaciones económicas del Banco Itaú, el retroceso de los niveles de deuda externa del país obedece a la reanudación del proceso de consolidación fiscal del país tras el incremento en el gasto con motivo de la pandemia. Adicionalmente, agregó, “el crecimiento de la actividad económica y la apreciación de la moneda favorecen la relación deuda externa/PIB”.

La cartera de Hacienda también reveló que 91,6% de la deuda interna corresponde a Títulos de Tesorería (TES), 5,8% a Pagarés de Tesorería y 2,5% a otro tipo de fuente. La diferencia entre los TES y los Pagarés radica principalmente en que los primeros son los títulos de deuda pública emitidos a un plazo estipulado por el Gobierno central a través del Ministerio de Hacienda y Crédito Público con el fin de conseguir liquidez. Los segundos, en cambio, comprenden garantía de créditos que ha otorgado para un fin específico.

Por su lado, la deuda externa de la Nación se divide en 48,7% debido a la Emisión de Bonos de Deuda; 13,9% de préstamos provenientes del BID; 17,8% del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (Birf); 3,6% del CAF y 15,9% de otras fuentes de endeudamiento.

Adicional a las medidas de ajuste fiscal, Pardo también le atribuye importancia al crecimiento económico de 5,6% que se proyecta para 2022. Este jalonará a la baja los niveles de deuda bruta del país. Además, dijo, “el Gobierno espera una menor emisión de deuda, tanto interna como externa, lo cual se ve reflejado en las mejores proyecciones que tiene gobierno en cuanto a la senda de esta”.

En cuanto a los tipos de interés, la deuda interna está adquirida en su totalidad a una tasa fija. 63,1% del total de las obligaciones están pactadas en una tasa fija en pesos (COP fija) y 30,67% en una tasa fija de Unidad de Valor Real (UVR). Para la deuda externa, 87% de esta se pactó con una tasa fija y 13% con una variable.

Entre los inconvenientes que se pueden presentar para que la deuda vuelva a retomar índices al alza se puede encontrar una revaluación de la Tasa Representativa del Mercado (TRM). Pues, de esta manera, se encarecerían toda la deuda externa, la cual representa 37,7% del total para marzo.

Bajo este mismo panorama, 88% del total de los compromisos adquiridos en el exterior fueron en dólares (USD) y 9% en euros (EUR).

Para Pardo, también existen otros factores que podrían representar un riesgo para el aumento de la deuda. Entre estos se pueden encontrar el aumento de las tasa de interés a cargo del Banco de la República, lo cual terminaría repercutiendo en un aumento en el costo de endeudamiento.

En cuanto al factor externo, lo mismo podría suceder cuando la Nación quiera conseguir nuevos préstamos, pues con las previsiones al alza de las tasas de intervención en los bancos centrales de Estados Unidos y Europa, harán que las tasas a las que se endeuda el país también suban.