"La financiación no debería ser la única discusión en torno a la reforma a la educación"

El grupo de las universidades G-10, en cabeza de Raquel Bernal Salazar, rectora de la Universidad de los Andes y coordinadora de este grupo, se pronunció respecto a la reforma a la Ley 30 que anunció el Gobierno Nacional.

Bernal, en el escrito, menciona que la financiación no debería ser la única discusión que gire en torno a la reforma de la educación superior, en especial la Ley 30 ya que, según este grupo, no se debe dejar pasar la oportunidad de repensar el sistema completo.

"En esta coyuntura, la financiación no debería ser la única discusión que se da en el país en torno a la reforma de la educación superior, y en particular, la Ley 30. Esta es una coyuntura local y global histórica, un punto de inflexión para lo que ocurrirá con todo el sistema educativo, y en especial, la educación posmedia. Este país no puede dejar pasar esta oportunidad para repensar todo el sistema. De esto depende nuestro futuro", dijo Bernal.

En el análisis, se resalta la importancia de pensar la reforma en pro de una evolución hacia la era digital que vaya en dirección a la nueva coyuntura que viven los jóvenes en el país. Bernal, resalto que "los jóvenes requieren un marco mental digital para poder vivir de manera exitosa en un mundo que es así".

Además, dijo que "no podemos seguir enseñando como lo hacíamos hace 20 años porque eso no es suficiente para ejercer profesionalmente, ser un ciudadano global que contribuye a las democracias o una persona que se comunica y se relaciona en la era de la revolución informática, personas capaces de pensar con rigor, de reflexionar, e ir más allá de lo que hacen las máquinas."

Las preocupaciones fueron respaldadas por el informe más reciente del Foro Económico Mundial del futuro del empleo cuyos resultados arrojaron que para 2030 cerca de 30% de las tareas de 65% de las ocupaciones se habrán automatizado para ese mismo año, lo que le supondrá a la educación superior "tener que estudiar de manera continua para poder mantener actualizadas nuestras competencias y ser relevantes en el mundo."

Para este fin, este grupo propone que la educación sea ágil, flexible e incluyente y que se piense en concordancia con la evolución de la tecnología y los sectores económicos, en este sentido proponen que "los programas deben renovarse de manera continua para atender el cambio en competencias.".

Otro punto resaltado se basa en que los retos de la educación superior no están solo en la calidad sino en una actualización convergente. Es por esto que en el escrito se afirma que la mejor apuesta de este grupo sería : "aprender, pilotear, implementar y evaluar. Trabajar con los sectores económicos de manera más cercana para lograr refinar las competencias de manera permanente, y definir las formas de enseñanza y aprendizaje que nos permitan formar esos jóvenes capaces de aprender."

Lo anterior, se asegura, "no lo podremos hacer, señora Ministra, señor Presidente, sin una reforma visionaria, que entienda las implicaciones del futuro que nos espera, que piense en los retos que tendrán que enfrentar los jóvenes, más temprano que tarde. " afirmó Salazar.

Como conclusión, el escrito postula que se hace necesario tener en cuenta para la reforma temas como agilizar el proceso de apertura de nuevos programas y poder operar en contextos flexibles involucrados con la tecnología para que estos permitan "trabajar para reducir la inequidad regional en el acceso a educación de calidad". Además de otras inversiones como capacitación de profesores para lograr el objetivo anteriormente mencionado.