“La gente no conoce sus derechos como contribuyente”: Defensor del contribuyente
viernes, 29 de noviembre de 2019
Desde la Defensoría del contribuyente se atienden solicitudes de información, consultas técnicas y se brinda acompañamiento con obligaciones tributarias
Laura Lucía Becerra Elejalde
En la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) existe una Defensoría del contribuyente y del usuario aduanero, un órgano que se espera fortalecer con la nueva reforma tributaria. Desde hace cuatro meses, Daniel Acevedo se desempeña como Defensor del contribuyente y del usuario aduanero, y explicó cuáles son algunos de los cambios que desde ya se impulsan en la entidad.
¿Cuáles son las principales funciones de este organismo?
La finalidad específica de la Defensoría es cuidar los derechos de los contribuyentes. Hoy en día tenemos 15 derechos fundamentales, desde lo más sencillo que es el trato, el cómo me siento tratado cuando voy a un punto de contacto, cómo es el relacionamiento con el funcionario, hasta temas de análisis de procedimiento más profundos, de recaudo, y de cómo se pueden hacer los procesos tributarios. La gente a veces no lo entiende y no conoce sus derechos.
¿Cuántas solicitudes han recibido este año?
El año pasado la Defensoría atendió a 7.500 colombianos en atenciones generales, lo que es atención personalizada y solicitudes directas de veeduría, en estos cuatro meses superamos ya 5.200 personas, podemos decir que vamos a duplicar el modelo de servicio. No quiere decir que hayamos encontrado más vulneraciones, sino que hemos sido más cercanos al contribuyente.
Cuando hablamos de procesos de vulneración, el año pasado tuvimos 2.200, y este año estamos cercanos a 2.400. Después de revisar, de cada 10 personas, encontramos elementos que den lugar a una vulneración de derechos solo en 1,5 de las personas que nos piden la participación.
¿Cuáles son las principales quejas que reciben?
Las cinco principales razones por las cuales la gente va a la Defensoría son: para solicitar información que les permita cumplir obligaciones, eso es 17%; para hacer consultas técnicas de normatividad, cuando demandan acompañamiento para surtir sus trámites, con la dificultad en el uso de los sistemas informáticos y electrónicos y cuando la Dian hace algún cobro inexistente.
En la tributaria se incluyó un artículo para darle más fuerza a la Defensoría, ¿qué cambiaría?
El querer de hoy en día en la Dian es hacer crecer la cobertura. La idea es que la Defensoría sea un canal para mejorar la cercanía. Somos una entidad de 26 personas que atiende casos de 10.000. La Defensoría no ha tenido esa cobertura por la incapacidad de personal. El artículo en la Ley de Crecimiento dice que mínimo tenemos que tener delegados en todas las seccionales que sean de nivel 3, que son las más grandes. Pensaría que podemos crecer 40% más en delegados y vamos a duplicar la capacidad de servicio y atención.
¿Qué otros cambios están impulsando?
Cuando llegamos miramos cuál era la visibilidad de la Defensoría. Más de 90% de las personas no sabe que existe. El Gobierno empezó un proceso de buscar una nueva estructura para que sea más eficiente, en visibilidad, con cercanía, con coordinación. Queremos que sea una puerta muy agradable para que el ciudadano se pueda dirigir a la Dian.
¿Qué aporte al recaudo genera la gestión de la Defensoría?
Una es la plata que ingresa porque un trámite no se podía lograr porque no se atendía, los destrabamos y entra ese recaudo a la Dian, el otro es un efecto bien interesante que es cuando la Dian deja de pagar plata casi que indemnizando a la gente, porque se generó una vulneración. Calculamos que en los cuatro meses anteriores, en efecto de dinero que le entró a la Dian superamos los $7.500 millones.