La ley de espectáculos por conciertos y eventos ha logrado dejar $104.451 millones

Hoy en día, cuando un artista internacional anuncia una gira por América Latina, lo más seguro es que Colombia esté en la agenda. Desde 2011, los conciertos de estadio y de más de 4.000 personas han crecido 62%, según reportes del sector. Desde el Gobierno se ha dicho que buena parte de la razón de las mejores formas de gestionar un evento es por la ley de espectáculos que entró en vigencia en 2012.

La normativa buscaba simplificar permisos de los shows, reducir la carga tributaria de los empresarios de la industria y tener una base de aportes parafiscales que se reinviertan en escenarios para las artes. Al día de hoy estos dineros por ese concepto son $104.451 millones.

“La contribución es de 10% sobre el precio total de las boletas, pero las que superan a tres UVT o $99.468 para este año, luego estos dineros van de regreso a los territorios de donde se realizaron, cuando la ley se implementó fueron 12 municipios los beneficiados hoy ya vamos en 127, de hecho creíamos que para esta fecha el recaudo iba a ser 50% de lo que ya se logró”, explicó la ministra de Cultura, Mariana Garcés, cartera que promovió la iniciativa.

Bogotá ha beneficiado al mayor numero de escenarios para la presentación de espectáculos públicos con 45 espacios, luego sigue Cali, con 17; Medellín, con 11; en Chía son 10 lugares, y Barranquilla, otros ocho.

Alfredo Villaveces, CEO de Move Concerts, señaló que “la música, que por ejemplo es de las que más aporta con parafiscales, debería ser la más beneficiada. Hoy no hay escenarios adecuados para realizar los conciertos y esos aportes muchas veces terminan en teatros porque dependen de los gobiernos distritales, es decir del criterio territorial”.

El comentario hace parte de las peticiones de los empresarios del sector que si bien se han beneficiado de la ley, sugieren con el tiempo algunas mejoras.

Por ejemplo Luz Ángela Castro, directora de Ocesa Colombia, dijo que “si los aportes de los parafiscales se invirtieran directamente en los mismos escenarios musicales, esto reduciría los costos que luego se tienen que hacer en cada presentación. En un concierto en los espacios de hoy, se deben adecuar camerinos y una infraestructura extra que exige más inversión, incluso eso interviene en el precio de las boletas”.

La ley también logró cambios para el sector, por ejemplo hay que recordar que antes de 2011, los organizadores de los eventos debían cancelar un impuesto de 33% sobre el total de los honorarios del artista, algo que afectaba las ganancias del evento y era de los más altos del continente. Ahora esto se bajó al 8%.

También se incluyó que los estadios podrían ser utilizados para la realización de grandes conciertos, pues desde el Mundial Sub 20 esto se prohibió. Aquí hay otra recomendación de los empresarios, la ley permite alquilar una vez por mes el lugar, esto ya ha generado conflictos, pues en noviembre próximo se programó a Shakira el 2 de ese mes y el 21 a Roger Waters en El Campín; el de la barranquillera tuvo que anunciarse en el Parque Simón Bolívar, si ella no hubiera aceptado, Bogotá se habría quedado sin un concierto de US$5 millones.

Los eventos que más movieron el recaudo
En la realización de espectáculos, la contribución parafiscal es aportada principalmente por los conciertos, pues el promedio de boletas en el país para encuentros de 4.000 personas y más de 15.000 aficionados está entre $150.000 y $450.000. Sin embargo, llama la atención que el evento que más ha sumado a la contribución es el Circo del Sol, la producción canadiense que ha traído Ocesa Colombia suma cerca de $12.000 millones en parafiscales con solo cuatro ediciones, cada una con $3.000 millones.