Economía

Las cinco dudas de los empresarios y comerciantes a la ley de licores

Jhon Guzmán Pinilla

Por esta razón, LR decidió enumerar cinco ‘peros’ o cuestionamientos de los comerciantes y empresarios contra la ley de licores. El primer inconveniente tiene que ver con el incremento en los impuestos, que, puede representar aumentos de hasta de 140% en el precio de los vinos, dependiendo su clase. El whisky podría subir hasta 100%, según el grado de añejamiento, mientras que el aguardiente y el ron crecerían 50% y 40%, respectivamente.

En segundo lugar habría más contrabando, teniendo en cuenta que actualmente “una de cuatro botellas de licor es ilegal, bien por falsificación o contrabando. Además, en Bogotá, una de cada tres botellas se compra en San Andresito”, argumentó el presidente de Fenalco, Guillermo Botero.

El tercer ‘pero’ está relacionado con el hecho de que no se recolectarían más impuestos, como se pretende con la medida. Así lo señaló Javier Díaz, presidente de Analdex, quien afirmó que más impuestos llevaría a una mayor evasión. 

Otro de los factores que preocupan del proyecto de ley es que el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) tendría que clasificar más de 12.000 referencias de bebidas, lo que para distintos gremios no sería una tarea fácil de cumplir.

Por último, también se cuestiona el potencial daño que sufrirían los pequeños negocios, los cuales subsisten con la venta de distintas bebidas alcohólicas, dijeron los expertos.

María Claudia Lacouture, ministra de Comercio Industria y Turismo, declaró que esta ley “busca regular y establecer reglas de juego claras para todo el sector de licores, más no cambiar el monopolio que está establecido. Lo que busca es que tanto los productos nacionales como los internacionales tengan unas reglas de juego igualitario”. Con esto el Gobierno estaría protegiendo la producción local. 

Sin embargo, Jorge Marín, presidente Asociación Colombiana de Toxicología Clínica, creen que “entre mayor sea la disponibilidad del alcohol mayor se afecta la salud pública. Por eso es una tendencia mundial reducir el consumo. El país debe proteger a la población joven, ya que el alcohol es la puerta de entrada a muchos riesgos como accidentes de tráfico y consumo de otras sustancias”.

Finalmente, los empresarios esperan que la posición sea tenida en cuenta por el Gobierno y continúe el monopolio.

Las aclaraciones sobre el proyecto
El Ministerio de Comercio aclaró algunos “mitos” que giran en torno a este proyecto de ley: el primero es que el monopolio se mantiene en cabeza de los departamentos y se reglamenta para generar pautas claras. Otro de los puntos es que la renta de los departamentos se aumentaría $1,8 billones, “en un escenario muy conservador” y las licoreras podrán acceder a mercados más amplios, es decir, en todo el país. La entidad destacó también la protección al aguardiente, los mayores impuestos a los importadores y la protección contra el contrabando de licores.

La opinión

María Claudia Lacouture
Ministra de Comercio, Industria y Turismo
“Buscamos regular y establecer reglas de juego claras para todo el sector de licores, más no cambiar el monopolio establecido”.