Los corrientazos están hasta 27,06% más caros que hace un año por insumos al alza

Si usted es de las personas que tiene que salir por trabajo y compra almuerzo ejecutivo, seguramente ha notado que los precios han subido; y es que, efectivamente, las cifras del Sistema de Información de Precios y Abastecimiento del Sector Agropecuario (Sipsa), que publica el Dane, evidencian que en el último año el precio para preparar este tipo de platos ha aumentado hasta 27,06%, dependiendo de la ciudad.

Para hacer este cálculo, LR tomó los precios de los alimentos básicos para hacer un corrientazo en diferentes centrales de abasto en Bogotá, Medellín, Barranquilla y Bucaramanga, tales como carne de res, plátano, arroz, fríjol, cebolla, tomate, aguacate y zanahoria.

En Bogotá, el insumo que más ha subido de precio en el último año es el fríjol bolón, que se encareció 84,71%, pues el kilo pasó de costar $7.850 en la semana del 29 de enero a 4 de febrero de 2022, a $14.500 en la semana del 28 de enero al 3 de febrero de 2023.

Para preparar este plato también se necesitan productos como el plátano maduro, algunas verduras como la zanahoria, y una proteína, como la carne de res. Los cuales también han visto aumentar su precio en la capital, con variaciones de 26,3%, 44,95%, y 14,08% respectivamente.

Teniendo en cuenta todos los alimentos necesarios, incluyendo arroz, cebolla y tomate, el costo para preparar almuerzos ejecutivos en Bogotá, medido en kilos, pasó de $50.203 en la primera semana de febrero de 2022, a $63.722 en el mismo periodo de 2023, es decir, aumentó 27,06%.

Pero esto no solo sucede en la capital. De hecho, una de las ciudades en donde más aumentó la inflación mensual en enero (1,97%) es Bucaramanga y, al hacer este mismo ejercicio, en la capital de Santander se evidencia que el precio para preparar los almuerzos ejecutivos aumentó 19,43% en el mismo periodo de cálculo.

En otras capitales, como Barranquilla y Medellín, el incremento ha sido de 18,67% y 26,71%, respectivamente.

La directora del Dane, Piedad Urdinola, resaltó que las comidas preparadas por fuera del hogar, como comidas rápidas, pizzas, hamburguesas y empanadas, están más caras en ciudades como Manizales y Bogotá. En la primera, se registró una variación mensual de 4,69%.

De hecho, uno de los temas de agenda va en la dirección de que comer por fuera del hogar se está encareciendo más que preparar comida en casa.

Para los analistas, el alza en los precios de los alimentos se está empezando a moderar. “La inflación de alimentos cayó y ya no está por encima de 27%. Ya comenzó a ser 26,2%, que es un dato todavía muy alto, pero que está comenzando a moderarse”, destacó Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria.

El experto señaló que, con los resultados de inflación en enero, cuando el indicador llegó a 13,25% anual, pareciera que ya comienza a haber un techo.

Laura Peña, economista de Bbva Research para Colombia, señaló que “la inflación de alimentos muestra una desaceleración en su variación anual por primera vez desde mayo de 2022. Sin embargo, parte de esta se explica por efectos base, que se perciben principalmente en los productos perecederos, que se desaceleraron en cerca de 400 puntos básicos”.