Economía

“No hay peor mensaje sobre la seguridad jurídica para invertir en colombia”

Colprensa

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Dice que no sale de su sorpresa, pues no entiende que la nueva compañía haya quedado bloqueada para trabajar, por decisión de un juez municipal, que le extendió las medidas cautelares solicitadas por Carlos Mattos, dueño de Hyundai Colombia Automotriz, contra la matriz Hyundai Motor Co., una vez la empresa coreana puso fin a la relación comercial de 23 años.

Lenis resalta la paradoja de que ese bloqueo contra inversiones coreanas suceda al mismo tiempo que se pone en marcha (este viernes) el TLC firmado por Colombia con Corea del Sur. “Estamos quedando como un país muy poco serio”, dijo en entrevista con Colprensa.

¿Cómo va el arranque de Neocorp, ahora que su operación quedó cortada por las medidas cautelares impuestas en su contra?
Las cosas van muy mal y de una manera que no se entiende. Las medidas cautelares fueron pedidas por la empresa de Carlos Mattos contra la Hyundai Motor Co., pero el juez decidió extenderlas y nos metió a nosotros. En el pleito no estamos metidos y por eso no podemos apelar ni interponer otro recurso, pero tampoco podemos operar, estamos maniatados. Estamos cumpliendo con los clientes que ya tenían vehículos Hyundai, pero no podemos vender ni un carro nuevo.

¿Por qué cree que el juez tomó esa decisión de extenderles las medidas que iban contra la matriz coreana?
Soy enemigo de hacer juicios de valor, no me meto a calificar el actuar del juez, pero alguien tendría que hacerlo, alguien tendría que ver realmente cómo se extendieron las medidas cautelares. No soy abogado, pero entiendo que con esa figura se tiene que producir una caución, para que haya alguien que responda si se produce un daño; nosotros ni siquiera tenemos caución que respalde esa extensión del juez. Si mañana nos dan la razón y las medidas cautelares no procedían, no hay quien nos pague, no tenemos nada a favor.

¿Y cómo está procediendo Hyundai Motor Co.?
Ellos ya interpusieron un recurso, antes de la extensión de las medidas cautelares, por lo que eso era lo primero que debía contestar el juez y no lo ha hecho. Un asunto que me parece muy curioso, y que está totalmente documentado, es que ante las peticiones del señor Mattos, el juez se ha tomado 3, 5 ó 7 días, pero ante la de Hyundai Motor Co. lleva más de un mes sin contestar.

Usted dijo que no quiere hacer juicio de valor, pero es inevitable no ver que en sus palabras hay una crítica a la actuación judicial…
Pues sí, es evidente que a Hyundai Motor no le están respondiendo a la misma velocidad.

¿Cuáles son los efectos de esta situación sobre los propietarios y los compradores?
Creo que el efecto hay que repartirlo en varios tipos de daños. El primero de todos es el efecto país, totalmente perjudicial. Hoy (viernes 15 de julio) inicia el TLC con Corea (del sur) y va a iniciar con unas medidas cautelares contra la principal compañía de ese país. ¿Cuándo se había visto eso en la historia? Que arranque una relación comercial con unas medidas cautelares que los coreanos no entienden de ninguna manera, pues lo que ven es que los intereses económicos de una persona están por encima del bien común. Estamos quedando como un país muy poco serio, ¿acaso el TLC lo firmó solo el Presidente? No, el Tratado pasó por el Ejecutivo, por el Congreso y por la Corte, el TLC lo firmó todo el país, no una persona.

¿Así que usted cree que hay un efecto directo sobre la credibilidad en la seriedad comercial de Colombia?
Ese es el efecto. Ayer ya se conoció un comunicado de castigo al país por la inseguridad jurídica. Lo que está pasando es lamentable en términos de seguridad jurídica para el inversionista extranjero, no hay peor mensaje posible.

Vuelvo a preguntar ¿cuáles son los efectos sobre la gente?
Para los consumidores también es muy grave, porque los que quieren comprar no pueden hacerlo y los que ya habían comprado ven cómo su patrimonio está perdiendo valor, eso hay que reconocerlo. ¿Quién quiere comprar un Hyundai así? Eso está pasando pese a que, insisto, seguimos honrando las garantías que se habían adquirido, atendiéndolas, pagándolas, con todos los centros de servicio y talleres abiertos y operando, con suficientes repuestos para esa operación y cuando falta un repuesto, lo traemos por avión, para cumplirle al cliente en el menor tiempo posible.

¿Cuántas garantías han atendido?
Cerca de mil, sumando todas las referencias.

Pese a cumplir con esas garantías, ¿algo perdió el usuario desde que compró su carro hasta ahora?
Pues se ha creado una sensación muy rara: tener un carro de una marca de la que todos los días se ventila un problema nuevo. Eso genera inseguridad y ya hay casos de gente que quiere vender su vehículo y no puede hacerlo fácilmente.

Por los usuarios, es un problema que debe atender la Superintendencia de Industria y Comercio…
Claro, estamos esperando los pronunciamientos de la Súper, que en últimas es la que protege a los usuarios y que debe responder varios temas que le hemos preguntado. Hemos tenido reuniones con ellos, les hemos explicado cosas, sé que han estado trabajando. Puntualmente, la semana pasada hablamos del tema de repuestos y garantías, porque uno no sabe, a esta velocidad de demandas, si pueden meter otra contra esas actividades. Ya la semana pasada intentaron meter otras medidas y no están vigentes solo las cautelares contra Hyundai Motor Co., también una juez municipal, ¡imagínese usted!, cauteló contra Global, la compañía que atiende el mercado de pesados.

¿Usted cree que no se debió acudir a esas medidas cautelares para un asunto comercial?
Yo no digo que nunca se pueda acudir a la figura de las medidas cautelares, pero ¿por qué si uno tiene 23 años un contrato que incluye una cláusula tribunal de arbitramento, para resolver cualquier disputa que hubiera entre las partes, al final ya no le sirve esa cláusula? Entonces para qué la firmó 23 años.

¿La firma Neocorp ha hablado con Carlos Mattos?
Él me llamó hace unos meses. Le dije que con mucho gusto le servía de puente, pero que no iba a ponerme a llevar y a traer razones. Él se sentó a hablar con el accionista de Neocorp, pero no llegaron a un acuerdo.

¿De qué tamaño son las pérdidas en que está incurriendo Neocorp?
Pues en la parte de servicios seguimos operando. El mayor problema está en que tenemos unos inventarios grandes de vehículos, que fueron comprados y pagados a Hyundai Motor Co., pero que hoy en día no podemos vender directamente ni tampoco se los podemos vender a los concesionarios, por decisión de un juez.

¿Cuándo se volvería crítica la situación?
Crítica es desde ya, pero es más preocupante la situación de los concesionarios. No hay uno de ellos en el país, y son 30, que no esté perdiendo plata. Cuando se anunció el cambio, Carlos Mattos dijo que los concesionarios se iban a quebrar, pues los va a quebrar es él, porque las medidas cautelares los afectan directamente, mientras siguen teniendo las obligaciones con los bancos. Ahora sí va a ser verdad todo lo que Mattos hablaba sobre desempleo, porque a los mismos concesionarios que fueron de él por más de 20 años, los dejó sin posibilidades de vender.

¿Por qué Neocorp no ha buscado una salida judicial, como pedir sus medidas cautelares que le permitan vender?
Todos esos recursos caben; lo que pasa es que estamos más orientados a ir a la Superintendencia de Industria y Comercio, que es donde se debe defender el derecho del consumidor y el derecho a la libre empresa, que a los jueces civiles del circuito o a los jueces municipales, donde seguramente habrá una pelea que no nos llevará a nada.