Economía
“No somos tan optimistas con la cosecha de este año”
miércoles, 29 de mayo de 2013
Teresita Celis
El optimismo que tiene la Federación de Cafeteros, con la recuperación de la cosecha colombiana en 2013, que la ha estimado sobre 10 millones de sacos, no llega a los exportadores privados, que responden por cerca de 65% de las ventas externas de grano. El presidente ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Café de Colombia (Asoexport), Carlos Ignacio Rojas, mira esa cifra con duda y señala que la cosecha podría moverse sobre los 9,1 millones de sacos en promedio para este año.
¿Por qué no son tan optimistas con la cosecha?
Colombia ha tenido una caída grande en la producción en los últimos años. Hicimos un ejercicio de números y estadístico de la producción histórica reciente, de los últimos cuatro años mes a mes, y nos dio un rango que en un escenario muy bueno la cosecha llegaría a 9,7 millones de sacos y en un escenario pesimista sería de 8,6 millones. Entre ese rango la cosecha puede estar en un punto medio de 9,1 millones en promedio para este año.
¿Ven difícil la meta de Federación?
Honestamente vemos difícil que este año se llegue a los 10 millones, ojalá se cumpla ese pronóstico, pero no somos tan optimistas y preferimos ser más cautos y no generarle falsas expectativas al mercado.
Se ha dicho, ante la caída de la producción en Centroamérica, que se podría entrar a conquistar los clientes que ellos dejen de atender ¿lo ve viable?
Los centroamericanos se tomaron el mercado que Colombia dejó por la caída en la cosecha, pero la producción del país no va a poder suplir ni siquiera la caída de ellos.
¿Por qué proponen que se pueda sembrar otras variedades?
No es una propuesta. Lo que estamos diciendo es que todas las alternativas se deben evaluar juiciosamente y permitir la iniciativa privada para que se desarrollen negocios que los productores vean como buenos.
¿Cómo cuáles?
Pueden ser las robustas pero implicaría cambiar el modelo que genera costos y riesgos. Pero hay pasos intermedios que son los cafés arábicas no lavados y los semilavados. Colombia puede producir y exportar sólo arábicas lavados, entonces los no lavados son más cercanos, no implican cambiar la variedad y hay un ahorro en agua. Es darle la oportunidad a los productores de que ellos decidan qué es lo que más les conviene. La demanda mundial por robustas ha crecido 3,5% anual en promedio, las arábicas no lavadas 1,8% y las arábicas lavadas 0,8%, es decir, Colombia está produciendo el café cuya demanda está creciendo menos.
¿Qué es lo que piden?
No coartar la capacidad de innovación de los empresarios porque no se justifica que les pongan más limitaciones. El compromiso de los exportadores es vender el café que se produzca en Colombia al mejor precio posible. Al final lo que cuenta es el margen de utilidad y lo que funciona es lo que sea rentable. Las arábicas no lavados pueden pagarse a un menor precio pero ahorrar mucho más en costos.