¿Qué buscan los empresarios en sus trabajadores?

A la hora de tomar una decisión sobre qué carrera estudiar o qué competencias desarrollar para sumar puntos profesionalmente, es bueno saber qué prefieren los empresarios en sus equipos.

LR habló con voceros del sector privado en el Eje Cafetero, quienes indicaron que creen que sus profesionales deben dominar, por lo menos, dos idiomas y tener competencias tecnológicas sin olvidar los oficio tradicionales de dicha región.

Esto se explica porque los industriales de Risaralda, Caldas y Armenia señalan que la oferta de posibilidades laborales aún es muy variada, pues ha entrado inversión en compañías de BPO e innovación tecnológica y digital, pero no se han dejado de lado las actividades tradicionales que aún sostienen buena parte de la economía de estos departamentos, como el manejo textil, los caficultores y el turismo. No obstante, pese a esta diversificación de los frentes económicos, hay una constante que demanda el sector privado: el bilingüismo.

Desde el frente gubernamental, los encargados de la dirección de capital humano del Plan de Transformación Productiva (PTP) también enfatizan en la necesidad de que los profesionales de la región hablen inglés, porque “en este momento el Eje Cafetero tiene una apuesta por el sector de software y tecnologías en general, en donde el perfil de los profesionales debe ser el de un egresado capacitado para liderar procesos técnicos y tecnológicos” que requieren conocimiento en ese idioma.

Frente a esta solicitud encabezada por el gobierno, el director regional de la Universidad Eafit, Enrique Millán Mejía, considera que la academia está trabajando para cubrir la necesidad de una segunda lengua. “ En nuestra universidad resaltamos la importancia de que nuestros profesionales posean tres competencias: el bilingüismo, la capacidad de manejar las tecnologías de la información y las comunicaciones, y la formación ética y moral. Con estas tres herramientas proveemos personas que se ajusten a las demandas de una nueva industria que empieza a tener un papel importante en la región”, dijo.

Por su parte, Germán Calle, director de la junta directiva del Comité Intergremial de Risaralda, argumenta que los profesionales deben estar enfocados en las actividades que por historia han liderado la economía de la región, sin descuidar las nuevas tendencias industriales. “En este momento las estrategias de competitividad deben enfocarse en las industrias que nos han hecho fuertes como el agro y el café, la metalmecánica, y el sector de confecciones y el textil, porque desde luego, nuestra tradición operativa hace que gran parte de nuestras empresas aún funcionen y se beneficien con estas actividades”, señaló.

“Lo que necesita la región es no dejar pasar todas las ventajas y las apuestas tecnológicas, y con ellas crear modelos trasversales que mejoren la producción y la calidad de estas industrias tradicionales, pero sin estancarse”, agregó Calle, quien indicó que no se puede desconocer la importancia de industrias como los contac centers que hoy están jalonando el crecimiento de la economía de la región, razón por la que los jóvenes deben dominar el inglés y tener otras competencias.

Sin embargo, algunas partes del organigrama industrial del Eje Cafetero, como el PTP, aducen que en este momento la tendencia es fortalecer los programas técnicos y tecnológicos, sin descuidar la educación superior.

Según este programa de gobierno, la demanda actual de la región es de desarrolladores, técnicos y tecnólogos que ejecuten los proyectos, pues dentro de este perfil hay un déficit de personal que debería ser más alto porque actualmente el país tiene unas cifras aproximadas de 20% de técnicos frente a un 80% de profesionales.

Sobre esto, Luís Enrique Arango, rector de la Universidad Tecnológica de Pereira, argumenta que “la meta de la política educativa del Gobierno debe ser proporcionarle a la industria nacional y regional estos trabajadores, sobre todo con el trabajo del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), porque las universidades públicas deben atender las nuevas ofertas, aunque se ven restringidas por los recursos que les asigna el Estado, y las privadas, se especializan en formar profesionales que atiendan a la sociedad y sean innovadores”.

Además, Arango dijo que “la universidad puede atender las demandas de las nuevas tecnologías fortaleciendo la industria regional con carreras como la agroindustria, el turismo y la metalmecánica, acompañada de un fortalecimiento en el emprendimiento y el bilingüismo”.

Así las cosas, el equilibrio entre el sector privado y la academia en el Eje Cafetero debe buscarse con profesionales y trabajadores que manejen dos o más idiomas y que permitan establecer un engranaje entre las nuevas tecnologías y las actividades tradicionales.

El fortalecimiento de cualidades humanas
Dentro de las características y competencias más importantes que deben tener los profesionales, según los industriales de la región, se encuentran el comportamiento, los valores y su capacidad propositiva. Frente a esta necesidad, las universidades dicen que una de sus apuestas más fuertes es la de la formación humana de sus estudiantes, quienes deben ser grandes personas que actúen con base en la responsabilidad que tienen con la población del Eje Cafetero, quienes tienen un modo de vida diferente al del resto de las regiones y que actúan bajo parámetros tradicionales, que no se deben perder, sino potencializar gracias a las nuevas tendencias y conocimientos.

Las opiniones

Germán Calle
Director de la junta directiva del comité intergremial de Risaralda
“La academia debe tener un diálogo constante con la industria para potencializar el perfil de los profesionales, quienes deben liderar el progreso de la región cafetera”.

Luís Enrique Arango
Rector de la universidad tecnológica de Pereira
“Los profesionales deben tener participación en la sociedad, no deben ser autómatas sino capaces transformar el sector privado por medio de educación e innovación” .

Carlos Eduardo García López
Vicerrector académico de la Universidad católica de Manizales
“La preparación que ofrecemos a los jóvenes permite que sean competitivos en el mercado laboral y que puedan competir con egresados de cualquier región del país”.