Los reclamos en salud subieron 13,3% frente a lo reportado en agosto del año pasado
martes, 12 de noviembre de 2024
En el estudio presentado se muestra que la UPC de 2023 está subvaluada, esto debido a que la base de cálculo y el efecto adicional de la inflación
La Universidad Eafit, junto a un equipo de especialistas técnicos. PhD y expertos en Economía de la Salud, analizaron el tema de la desfinanciación del sistema de salud. Allí concluyeron que las insuficiencias de la UPC ha significado una erosión de recursos de las entidades del sistema, además que dicen no parecer recomendable emprender una reforma sobre la base endeble de un sistema desfinanciado.
También dicen que si surgiesen problemas, sería muy difícil identificar si provienen de una condición inicial defectuosa, o de un mal diseño del sistema. Mencionan que sería complicado evaluar el impacto de las modificaciones que se introduzcan al sistema.
Uno de los aspectos que encontraron para llegar a estas conclusiones fue la insuficiencia de la UPC (Unidad de pago por capitación), allí señalan que el shock inflacionario de 2022 y el incremento de la demanda de servicios en el post-Covid, llevaron a que la UPC "se quedara corta en 2022". Por lo que indican que hubiera sido necesario un ajuste adicional de 7,2% para restablecer el equilibrio observado en 2021.
En el estudio también se muestra que la UPC de 2023 está subvaluada, esto debido a que la base de cálculo y el efecto adicional de la inflación. Según los expertos, el valor estimado por cada UPC para 2023 era de $1,3 millones, lo que comparado con cada UPC de 2022 ($1,1 millones) es un incremento de 23,1%. Según lo que dicen ellos, el ajuste adicional necesario, teniendo en cuenta la resolución 2809 de 2022, sería de 5,9%.
Con este ajuste adicional señalan que se podría restituir en 2023 las condiciones financieras básicas que el sistema tenía en 2021. "A ello habría que agregar una compensación transitoria por la insuficiencia de la UPC en 2022, equivalente a 7,2% del valor de la UPC generado en ese año, que compensaría los desequilibrios financieros ya generados, permitiendo abordar de manera sostenible los retos que enfrenta el sistema por la evolución de la demanda, el envejecimiento de la población y el loable propósito colectivo de mejorar el acceso y la equidad del sistema. El valor total del ajuste y de la compensación equivale a $7,1 billones", se lee en el estudio.
Los expertos señalan que teniendo estos aspectos en cuenta, se llevó a una situación crítica a los gestores de riesgo del sistema, es decir las EPS. Mencionan que para 2022, el faltante en los ingresos necesarios ascendía a 7,2%. Y este mismo cerró en 2023 en 8,9%.
Los expertos aseguran que el desajuste persiste en este año. El valor estimado por cada UPC en 2024 es de $1,5 millones, el valor actual por cada UPC es de $1,2 millones, lo que se traduce en un incremento necesario de 17,5%. Teniendo en cuenta la resolución 2364 de 2023 (sin inclusiones), el ajuste adicional necesario sería de 7,1%.
Añaden que el faltante en los costos del sistema general de seguridad social es salud asciende a 8,9%. Y en cuanto al cálculo del faltante de financiación del sistema por concepto de insuficiencia de la UPC el ajuste total para ellos es de $11,9 billones.
"La insuficiencia de la UPC se refleja, por supuesto, en los resultados financieros de las EPS, que acumulan resultados negativos en sus actividades ordinarias del Sistema de Salud", dicen. Y añaden, "y en el colosal deterioro de su patrimonio, que es ya negativo en $6,1 billones, a junio de 2024 (sin incluir a la Nueva EPS), y que seguramente se tornará aún más negativo en el segundo semestre de 2024".
Explican que la insuficiencia empieza a reflejarse en la calidad del servicio. Entre 2023 y 2024 los reclamos en salud aumentaron 40,4% comparando abril de ambos años, seguido de julio con 26,4% y mayo con 15,5%. La variación acumulada en agosto de 2024 se sitúa en 13,3%.