“Si el transporte público tuviera gas, los ajustes en los precios serían menores”

Luego de un 2012 en el que el sector del gas superó las expectativas en la confiabilidad del servicio, Este año arrancó con nuevos retos. El principal: entregar precios más competitivos. Por ello, las empresas del sector se reunirán desde hoy en Cartagena en el congreso de Naturgas.

LR dialogó con Eduardo Pizano, presidente del gremio, quien asegura que la industria y el transporte público son las apuestas del sector en 2013.

¿Cómo cerró el año pasado?

Se logró estructurar un campo muy importante como Cupiagua, que permitirá complementar y aumentar las reservas de gas. Paralelo a eso, se logró terminar la construcción del gasoducto que trae el gas hacia el interior del país desde los llanos, lo que creó una mayor confiabilidad en el suministro. En materia de producción estuvimos en más de 1.000 millones de pies cúbicos diarios. De ellos, 150 millones fueron vendidos a Venezuela y, el resto se consumieron internamente.

¿Cuál es el reto para este año?
Vender más gas para el transporte público. Ahí hemos llegado a ciudades como Medellín, donde se hizo el Metroplús y se logró montar buses con motores dedicados a gas y eso ha funcionado muy bien, ya que los buses se están ahorrando unos $8 millones por mes si se compara con el consumo de diesel.

¿Por qué es atractivo el transporte público?
Ahí hay un negocio interesante y es que si logramos dar un combustible más económico, pues los pasajes van a ser más baratos y los reajustes en los precios serían menores. Pero necesitamos flexibilidad para llegar a ese mercado. Adicional a ello, y a pesar de las alzas que han tenido el diesel y la gasolina, el Gobierno tiene que subsidiar los combustibles, en cambio el gas no tiene ese problema.

¿Y cuál es la flexibilidad que piden?
Que haya un mecanismo de comercialización bilateral. Al finalizar el gobierno de Álvaro Uribe, se estableció que no se volvía a sacar el gas hasta que no se efectuaran unas normas que regularan el sector. Eso fue una locura, que hizo que quedara atrapado el gas y subieran los costos. Finalmente, el gobierno Santos permitió que se sacara transitoriamente por dos años. Gracias a ello, el gas en la boca del pozo cayó de US$6,14, a US$3,50.

¿Cuándo se cumplan esos dos años qué va a pasar?
El Gobierno está terminando unas reglamentaciones. Por una parte en el desmonte de precios de la Costa Norte, que está atado al precio del fuel oil internacional. Y la segunda es la de la comercialización mayorista. Se ha planteado que se haga por subasta pública, pero nosotros le pedimos que se haga por medio de contratos bilaterales en razón de que la oferta es mayor a la demanda. En la subasta de 2009, por ejemplo, Isagén empujó los precios hasta unos niveles equivocadamente altos, lo que hizo que ciudades como Medellín tuvieran que pagar un gas de casi US$10. Con esos precios, la industria se cambia a otras fuentes, ese mercado lo tenemos que cuidar ya que es el 38% del consumo total del país.

¿Cómo cuidarlo?
Llegando a los precios bilaterales. Ecopetrol, Chevron y los grandes productores de gas son conscientes de que no pueden ponerse a subir los precios porque terminan matando el mercado y no tienen donde venderle ese gas. Aquí hay sustitutos, hay industrias que se devuelven a carbón, a diesel y a fuel oil. Si se suben los precios, las empresas se retiran.

¿Cómo ser más competitivos en el transporte?
La clave es sacar las resoluciones a tiempo. Durante 8 años no hubo reajustes en tarifas de transporte a pesar de inversiones millonarias que se hicieron en infraestructura. Eso se fue quedando y acumuló en una sola alza lo de dos periodos, que se tuvieron que hacer cada 4 años. La clave es generar más demanda. Nuestra posición es que se debe construir un gasoducto desde Yumbo, hasta la frontera con el Ecuador, y mirar como logramos generar un consumo en la frontera que permita atender ese mercado y generar más volumen transportado para bajar los costos.

Competitividad, el tema clave del Congreso
Los empresarios del sector del gas se reunirán desde hoy, y hasta el próximo viernes en Cartagena, con el fin de discutir los retos que tiene la industria. Según, Eduardo Pizano, presidente de Naturgas, el sector ya superó el tema de confiabilidad en el suministro y ahora le está apuntando a ser uno de altos estándares, por ello debe haber menores precios.