Trump calificó a Colombia como una "guarida de drogas" y dijo que el país "está mal"

El presidente de los EE.UU., Donald Trump, señaló que Colombia es una “guarida de drogas” y que el país “está muy mal”.

El mandatario estadounidense agregó el calificativo de que el presidente, Gustavo Petro, es un “líder malísimo”. También dijo que es un “mal tipo y un matón”. Añadió que en Colombia se está produciendo cocaína a niveles no vistos y que eso no lo va a soportar el gobierno estadounidense por mucho tiempo.

Petro publicó en sus redes sociales que Colombia no es una guarida de drogas y que, de hecho, las drogas que se producen en el territorio nacional terminan en "guaridas estadounidenses" con la finalidad de abastecer la demanda que hay en ese país.

“Carteles es lo que hemos destruido los colombianos y lo seguiremos haciendo. Colombia debe separar la mafia del poder político y de la sociedad”, adicionó.

Luego dijo que se debe construir una estrategia común con la finalidad de enfrentar este fenómeno.

Una retórica que no cesa

"¿Qué pasa si nos quitan la ayuda? En mi opinión nada, tendremos problemas puntuales", esta afirmación fue hecha por Petro durante la rueda de prensa de medios internacionales el 23 de octubre.

A esto se agregó que el Presidente reconoció que, si EE.UU. retira la ayuda, la amenaza sería llevarse los helicópteros, lo que, a su juicio, constituiría uno de los mayores problemas.

Agregó que Trump lo ha calumniado y que, además, "ha insultado a Colombia".

Si bien el mandatario manifestó que el congelamiento o recorte de las ayudas podría traer consecuencias, a grandes rasgos señaló que estas no representarían una problemática estructural o definitiva para Colombia.

Trump indicó que se suspenderá toda la cooperación con el país, advirtiendo que podría incluso tomar más medidas por el tráfico internacional de narcóticos y el aumento de los cultivos ilícitos, afirmaciones que el Gobierno nacional ha rechazado.

Tras varios impases diplomáticos en lo que va de 2025, las tensiones aumentaron en el marco de ataques a lanchas que transitan en el Caribe por parte del Ejército de EE.UU.

Hasta la fecha, el gobierno estadounidense ha realizado siete bombardeos a embarcaciones, los cuales dejaron 37 fallecidos.

“Son obreros del narcotráfico. Igual que hay campesinos que terminan dando insumos a la hoja de coca por un dinero y por su situación de pobreza, en el mundo del Caribe las carencias también son tan grandes que muchas personas dedicadas a la pesca y al uso de la lancha con fines turísticos, u otros, terminan prestándole servicios al narcotráfico”, dijo.

Petro también señaló que es poco probable que EE.UU. imponga un arancel al petróleo y al carbón, y añadió que, en caso de que esto ocurra, el país mitigaría los efectos mediante la exportación de otros productos.

Cabe agregar que Colombia fue uno de los mayores receptores de ayuda de la potencia norteamericana, aunque los montos han disminuido desde el cierre de la Usaid. Reuters también informó que las fuerzas militares reciben importantes recursos para gastos de funcionamiento con el fin de enfrentar el narcotráfico y a los grupos al margen de la ley.

El jefe de Estado señaló que las cifras de los cultivos de coca han disminuido. Incluso enfatizó en que, para 2025, la tendencia sugiere que habría un decrecimiento en este rubro. También indicó que la disparada de los cultivos ocurrió durante el gobierno del expresidente Iván Duque.

“Casi que yo diría que en 2025 va a haber un decrecimiento de los cultivos de coca. Estos son datos de Naciones Unidas, no míos”, recalcó.

Petro adicionó que la ayuda estadounidense no va directamente al Presupuesto General de la Nación, sino que se dirige a organizaciones no gubernamentales, ONG.

“Esa ayuda va a las ONG que maneja la Agencia de los EE.UU. para el Desarrollo Internacional, Usaid, por fuera del Gobierno, generalmente de origen norteamericano. Es decir, es una ayuda para ellos mismos, es una ayuda al empleo de EE.UU. y a la compra de sus maquinarias y de su glifosato; pero no es una ayuda al Gobierno”, dijo.

A lo que agregó que habría que cuestionar si, según dijo, la aspersión de glifosato y el encarcelamiento de campesinos que cultivan la hoja de coca "representan una ayuda".

“Nosotros lo que recibimos es un perjuicio enorme, porque nos condena a la violencia”, dijo. Para luego concluir que desde que el expresidente de EE.UU., Richard Nixon, declaró la guerra contra las drogas, según dijo Petro, han muerto un millón de latinoamericanos.

"Lobby sobre Trump"

Petro dijo que EE.UU. retira su apoyo justo “cuando mejor nos va en la historia”. Luego enfatizó que la pérdida de ese respaldo es consecuencia del lobby que existe sobre el presidente Donald Trump.

Señaló que las cifras, según él, sobre el descenso de los cultivos no han sido informadas a Trump, y expresó que el encargado de negocios, John McNamara, tampoco lo ha hecho.

“No hay embajador. No se lo explican las personas expertas en EE.UU. que conocen de esto, sino un lobby ideológico muy penetrado por nuestra oposición política”, agregó.

Camilo González, internacionalista y profesor de la Universidad Javeriana, enfatizó que deben mantenerse los canales diplomáticos y que, aunque aún no se ha llegado a un punto de ruptura, es probable que esto ocurra si las tensiones entre ambos mandatarios continúan.

“Deben explorarse todas las posibilidades. Si no es directamente con la administración, pueden establecerse canales con congresistas estadounidenses, particularmente del Partido Republicano, para que logren convencer al Gobierno de que las acciones que está emprendiendo están lesionando la relación estratégica que tienen con Colombia”, concluyó.