Última movilización estudiantil del año estuvo marcada por enfrentamientos con el Esmad
jueves, 13 de diciembre de 2018
La ministra de Educación, María Victoría Angulo, continúa en conversaciones con los estudiantes.
Laura Lucía Becerra Elejalde
Este jueves las calles de las principales ciudades del país fueron nuevamente el escenario de movilizaciones protagonizadas por estudiantes y trabajadores pertenecientes a los sindicatos, quienes nuevamente marcharon solicitando más recursos para la educación superior.
Esta fue la última movilización de 2018, convocada por la Unión Nacional de Estudiantes de Educación Superior (Unees), en la que también se protestó en contra de los asesinatos de líderes sociales, y si bien no logró la misma afluencia que movilizaciones anteriores, sí se reportaron enfrentamientos con el Escuadrón Móvil Antidistubios (Esmad) en algunos puntos de la capital.
A pesar de que en Bogotá las marchas estaban programadas para medio día, , los estudiantes universitarios partieron de la Universidad Nacional a las 2:30 de la tarde por la Avenida 30 camino hacia el Parque de los Periodistas, en el centro de la ciudad. Según reportes de las autoridades, se reportaron desmanes a pocos minutos de haber iniciado la movilización, en la calle 45 con carrera 20.
Así mismo, se reportaron daños a las estaciones de Transmilenio, un hecho que condenó la Alcaldía Mayor de Bogotá.
En Medellín y en Cali las movilizaciones trascurrieron sin contratiempos. En la capital de Antioquia la marcha partió desde el Parque de los Deseos hasta el sector de la Alpujarra, mientras que en Cali las movilizaciones iniciaron en la parroquia Ignacio Loyola, en el barrio Terrón Colorado con destino a la plazoleta San Francisco, al frente del edificio de la Gobernación del Valle del Cauca.
Mientras los estudiantes desarrollaron la nueva jornada de movilizaciones, la ministra de Educación, María Victoria Angulo, se reunió por décimo cuarta vez con los voceros estudiantiles y profesorales en la mesa con la que se busca encontrar una solución al cese de actividades académicas, que ya completa dos meses y tras el cual 26 de las 32 universidades públicas del país han congelado ocho semanas del semestre académico en un paro nacional.
El centro de la controversia continúan siendo los recursos de funcionamiento. A pesar de que MinEducación se comprometió a construir, de forma vinculante, un artículo en el Plan Nacional de Desarrollo que permita transferir recursos del presupuesto a la base presupuestal de las Instituciones de Educación Superior públicas, los estudiantes consideran que aún no alcanzan.
Aunque el Gobierno ha ofrecido para 2019 un aumento de la base presupuestal de las universidades públicas de 3,5% por encima de la inflación, de 4% en 2020 y 2021 y de 4,5% en 2022, en la última reunión los estudiantes presentaron una propuesta para que durante la administración de Iván Duque las transferencias de la Nación para el funcionamiento de la Educación Superior crezcan 5 puntos del IPC para 2019, 6 para 2020, 7 para 2021.